La inesperada remontada del Real Madrid contra el PSG parecía que había calmado los ánimos. Florentino Pérez estaba molesto con Carlo Ancelotti, que había fracasado en el planteamiento del PSG-Madrid del Parque de los Príncipes, y eso que había tenido mucho tiempo, y lo volvió a repetir en la vuelta, en la que los franceses le pasaron por encima en la primera mitad. El Real Madrid remontó y todo fue alegría, aunque se mantenía la duda sobre la capacidad de Ancelotti para trabajar la pizarra cuando enfrente tiene un rival de entidad.

Y Ancelotti lo ha vuelto a hacer, pues en otro partido importante, contra el Barça y en el Santiago Bernabéu, ha vuelto a naufragar. Xavi Hernández, que acaba de llegar a la élite de los banquillos, le ha dado un baño táctico espectacular, desarbolando todo el planteamiento de Ancelotti, que sin Benzema ha decidido apostar por Modric como falso 9. La idea ha sido un desastre.

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Los jugadores del Barça, celebrando un gol en el Santiago Bernabéu / EFE

Ancelotti, un fallo tras otro hasta la debacle

Viendo el enorme error que había cometido, y con 0-2 ya en el marcador, Ancelotti ha reaccionado con una variación en la que todavía lo ha empeorado todo más. Ha quitado a Carvajal y ha puesto una defensa de 3. En menos de un cuarto de hora, Ferran Torres y Aubameyang han puesto el 0-4 en el marcador, y todavía ha podido ser peor, pues los dos mismos jugadores han fallado una ocasión clarísima cada uno.

Consumado el ridículo, al Real Madrid solo le ha quedado evitar que la derrota fuera todavía más sangrante. Ancelotti ha retirado a un Nacho superado y ha dado entrada a Lucas Vázquez, pero el daño ya estaba hecho. El Barça ha dominado la posesión a placer, provocando la indignación del público del Madrid, que no entendía lo que estaba sucediendo sobre el césped. De hecho, solo el desacierto del Barça en el remate final ha evitado que la goleada fuera mucho mayor. Ancelotti queda tocado.

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Xavi Hernández le ha dado un baño táctico a Ancelotti / EFE

Löw, el favorito de Florentino

Florentino Pérez, pues, mantiene abierto su plan inicial, el de emplear a Carlo Ancelotti como puente entre Zinedine Zidane y Joachin Löw, el elegido para dirigir el nuevo proyecto galáctico del presidente del Real Madrid. Florentino quiere un equipo ganador, con grandes estrellas sobre el césped, para inaugurar por todo lo alto el nuevo Santiago Bernabéu, y teme que la incapacidad de Ancelotti para estudiar los partidos le acabe pasando factura.

Löw hace tiempo que está en la agenda de Florentino y nunca ha escondido que le gustaría entrenar al Real Madrid. Ha estudiado castellano y sabe que en cualquier momento podría llegarle la oportunidad. Tras dejar la selección de Alemania, Löw se ha mantenido al margen y ha rechazado varias propuestas, pues sabe que el Real Madrid lo tiene en mente. Solo si Ancelotti gana la Champions su fichaje sería imposible. Si el Madrid no gana la máxima competición continental, todas las posibilidades estarán abiertas.

 

Imagen principal: Carlo Ancelotti ha naufragado en la preparación y la lectura del Real Madrid-Barça / EFE