En el pasado mes de julio de 2201, el Paris Saint-Germain se adjudicaba la medalla de haber fichado a coste cero a unos de los considerados mejores defensas centrales de la historia. Después de 16 temporadas en el Santiago Bernabéu, Sergio Ramos abandonaría el Real Madrid después de no haber llegado al entendimiento con Florentino Pérez con respecto a su renovación.
El PSG, con un palmo de narices
Si Florentino Pérez lo dejó salir del Real Madrid, por alguna cosa sería. Mientras tanto, en París, el central andaluz era recibido con un baño de masas a la altura de una estrella mundial. Llegaba lesionado, y a pesar de recaer un par de veces en los mismos problemas físicos, la afición parisina esperaba verlo vestido de corto con anhelo.
Sin embargo, con el paso del tiempo, los nervios fueron in crescendo y la idea de que no sería un activo para competir empezó a asentarse en la opinión pública del entorno del parque de los Príncipes. Traducido a cifras, Sergio Ramos ha disputado un total de 13 partidos con la camiseta del PSG aglutinando todas las competiciones. Dicho de otro modo, se ha perdido un total de 33 partidos en la presente temporada por lesión. Hay que tener en cuenta que, según desveló L'Équipe, cobra 6 millones de euros netos por temporada.
Al-Khelaïfi ya le busca sustituto
Y después de hacerse a la idea de que las lesiones de Sergio Ramos no acabarán, Nasser Al-Khelaïfi busca un relevo para el eje de la zaga de primer nivel. El escogido para acompañar a Marquinhos sería Milan Skriniar, futbolista eslovaco del Inter de Milán que es toda una referencia a la entidad nerazzurra.
Su valor de mercado, según transfermarkt.es, es de 65 millones de euros. No obstante, al acabar contrato en verano de 2023, el PSG aspira a hacerse con sus servicios por una cifra menor. Según la Gazzeta dello Sport, Al-Khelaïfi ha presentado la primera oferta formal para ficharlo: 50 millones. Sin embargo, el Inter pide 70 millones de euros a sabiendas del potencial económico del gigante francés.
Así pues, la confianza del PSG en Ramos ya no existe y Marquinhos ya conoce el nombre de su futura pareja en el eje de la defensa, ya que, difícilmente, el PSG rechazará pagar más.