Joan Laporta, en su segunda etapa como presidente blaugrana, heredó un FC Barcelona en la ruina. Los problemas económicos del club, derivados de una nefasta gestión de Josep Maria Martomeu, han obligado al actual mandatario culé a hacer auténticos milagros para conseguir rearmar una plantilla realmente muy escasa de nivel tras el adiós de Leo Messi. Después de una serie de palancas, y estudiar hasta el más mínimo detalle de cada movimiento, el Barça poco a poco "va saliendo de la UCI".

Sin embargo, todavía queda mucho camino por recorrer para que volvamos a ver a un FC Barcelona con las cuentas saneadas y con la capacidad que tenía tiempo atrás para poder acometer fichajes de renombre e inscribir a los nuevos futbolistas en la Liga. No obstante, todavía quedan algunos lastres por sacar de la plantilla, que ocupan un preciado espacio en el Fair Play financiero y que perciben un salario muy por encima de su valor de mercado, cosa de Bartomeu.

Josep Maria Bartomeu / Foto: EFE

El Barça despide a Gustavo Maia

Ahora, el Barça se tiene que enfrentar a la dura realidad de prescindir de algunos futbolistas que se han convertido en un auténtico calvario para los intereses culés. Fichajes incomprensibles por parte de un Bartomeu que no pasará a la historia, precisamente, por ser el mejor gestor.

Uno de los últimos fichajes del antecesor de Laporta, se va a marchar del FC Barcelona sin pena ni gloria. Se trata de Gustavo Maia, delantero brasileño que costó 4,5 millones de euros y que fue fichado en el verano del 2020, para reforzar al filial.

Gustavo Maia celebrando un gol con el São Paulo / Foto: Europa Press

Tres años después, el conjunto catalán despide al brasileño, que solo ha disputado 8 partidos con el Barça Athlètic, lo cual le ha convertido en uno de los peores fichajes de la era Bartomeu. Ahora se marchará al Vila Nova de la Segunda División brasileña, dejando claro que no tiene nivel.

El Barça y sus errores en el mercado brasileño

No obstante, no es el primer brasileño que se la cuela al FC Barcelona, que no está teniendo demasiada suerte con este tipo de fichajes 'random'. Laporta también fue víctima, en su primera etapa, de un fichaje de estas características, con Keirrison, que llegó previo pago de 14 'kilos' y que nunca llegó a debutar con el primer equipo.

Matheus Fernandes durante un partido del Barça /Foto: @ matheusf

Henrique, que costó 8 millones, y Matheus Fernandes, 7 millones fijos, más tres en variables, son otros de los protagonistas de la polémica política de fichajes del FC Barcelona, que en un intento de emular la suerte del Real Madrid en este mercado, han acabado haciendo el ridículo.