La situación de García Pimienta en el Sevilla FC atraviesa un momento crítico. Los últimos resultados negativos y la incapacidad del equipo para mantener un rendimiento consistente han encendido las alarmas en el Sánchez-Pizjuán. Aunque la directiva sigue apostando oficialmente por su proyecto a largo plazo, cada derrota reciente y las decisiones cuestionables en la gestión de los cambios han comenzado a desgastar la confianza de la afición en el técnico catalán. Los seguidores, cada vez más críticos, han empezado a pedir una respuesta urgente a la situación del equipo en la liga.
En medio de esta crisis, el nombre de Iván Juric emerge con fuerza como posible reemplazo. El croata, que guarda una conexión especial con el Sevilla tras su paso como jugador, acaba de ser destituido como entrenador de la Roma. Su salida del club italiano, marcada por conflictos internos y una racha de resultados irregulares, lo ha dejado libre en el mercado, y ha despertado el interés de los dirigentes sevillistas. Juric, reconocido por su estilo agresivo y su capacidad para motivar a sus jugadores, ha sido una opción que el Sevilla siempre ha tenido en mente, y su reciente disponibilidad podría suponer una amenaza seria para García Pimienta si los resultados no mejoran de inmediato.
Desde el entorno sevillista, la inquietud crece con cada jornada sin sumar victorias, y las voces que piden un cambio en el banquillo se vuelven más insistentes. La directiva del Sevilla, pese a su respaldo inicial, podría estar reconsiderando su postura si García Pimienta no logra reencaminar al equipo pronto. Los dirigentes son conscientes de la importancia de mantener a la afición satisfecha y del riesgo que supone para el club dejar pasar demasiadas oportunidades de mejorar en la clasificación.
Juric representa una figura de autoridad y cuenta con la experiencia para asumir el reto. Su perfil encaja con el carácter competitivo que exige el Sevilla, y su llegada inyectaría un nuevo aire a la plantilla. Sin embargo, el cambio no se haría a la ligera: el club ha invertido tiempo y recursos en el proyecto de García Pimienta, y la directiva mantiene cierta cautela ante la posibilidad de tomar una decisión tan drástica a mitad de temporada. Todo indica que el futuro del técnico catalán dependerá de su capacidad para revertir esta situación a corto plazo.
Con Iván Juric en el radar y la presión en aumento, García Pimienta afronta un ultimátum implícito en las próximas jornadas. Un giro en los resultados podría ser suficiente para disipar las dudas sobre su continuidad, pero otra racha negativa podría acelerar su salida y abrirle las puertas a Juric, quien está preparado y a la espera de una llamada desde Sevilla.