El futuro de Frenkie De Jong en el FC Barcelona está cada vez más en entredicho. El mediocampista neerlandés, quien en su día fue considerado como una de las grandes promesas del fútbol europeo, está viendo cómo su papel en el equipo se desmorona. La razón principal: el extraordinario nivel de Pedri y Gavi, quienes no solo son titulares indiscutibles, sino que están demostrando ser los verdaderos motores del equipo de Hansi Flick.
El rendimiento de Pedri es simplemente sobresaliente. Con solo 22 años, el canario ha alcanzado un estado de forma impresionante, siendo el cerebro que guía al equipo tanto en la creación como en la recuperación. Su visión de juego, precisión en los pases y capacidad para decidir partidos le han convertido en una pieza clave para Flick. A su lado, Gavi ha vuelto con fuerza tras superar su lesión. El andaluz aporta intensidad, carácter y esa energía incansable que contagia al resto del equipo. Juntos, forman una dupla que parece imparable y que deja poco espacio para otros mediocampistas.
A esta situación se suma la irrupción de jóvenes como Marc Casadó, quien ha aprovechado cada oportunidad para demostrar que puede aportar solidez y equilibrio al centro del campo, y la presencia de Dani Olmo, un jugador que Flick ha utilizado con éxito tanto en el mediocampo como en posiciones más ofensivas. Con este abanico de opciones, el rol de De Jong se ha reducido considerablemente, algo que no pasa desapercibido dentro del vestuario ni para la afición.
Los últimos partidos de Frenkie De Jong no han ayudado a mejorar su situación. Su bajo rendimiento, sumado a errores puntuales como el penalti cometido en el empate contra el Real Betis, han generado críticas y dudas sobre su continuidad. Incluso Flick, que inicialmente confiaba en él, parece haber perdido la paciencia. Según fuentes cercanas al club, el técnico alemán ya no ve al neerlandés como una pieza indispensable en su esquema.
La temporada es larga, y el Barça necesita mantener la rotación para afrontar todas las competiciones. Sin embargo, con un mediocampo tan competitivo y con la clara preferencia de Flick por Pedri y Gavi, el futuro de De Jong en el equipo se vislumbra complicado. No sería sorprendente que el club, con Deco al mando de las operaciones deportivas, escuche ofertas por el jugador en el próximo mercado.
El mensaje en el vestuario es claro: con Pedri, Gavi, y las alternativas emergentes, el Barça tiene su centro del campo asegurado. Y De Jong, por ahora, parece más un espectador que un protagonista en esta historia.