El Barça está metido de lleno en una reconstrucción y rejuvenecimiento de la primera plantilla para poder afrontar el futuro con garantías y optimismo. Una buena parte de esa reconstrucción está pasando por echar mano de los jugadores del filial, que están rindiendo, en muchos casos, por encima de lo esperado.

Xavi quiere hacer de De Ligt el nuevo Piqué

En ese grupo podemos incluir a Abde, Jutglà o Ilias Akhomach en ataque, Álvaro Sanz, Gavi o Nico en el centro del campo o Alejandro Balde en la defensa. Algunos de ellos están destinados a jugar en el Barça por muchos años, pero hay otros que seguro que les cuesta más aguantar en la élite absoluta, porque además, la competencia también viene desde fuera, en forma de fichajes. El más reciente, el de Ferran Torres.

Xavi quiere a De Ligt en el Barça / Europa Press

Porque desde el club saben que solo con lo que hay en las categorías inferiores no vale, y hay que mirar más allá para apuntalar ciertas posiciones clave. Una de ellas, la de defensa central. El FC Barcelona ha tenido en Gerard Piqué al relevo perfecto de Carles Puyol como capitán general de la zaga, pero Piqué no es infinito y hay que ir buscándole recambio.

De momento, los mejores situados son Eric Garcia y sobretodo, Ronald Araujo, pero son jóvenes y con poca experiencia al máximo nivel como para darles esa responsabilidad, y Xavi Hernández tiene a Matthijs De Ligt en la cabeza para asignarle ese rol de líder. Su juventud sigue siendo apabullante, ya que tiene solo 22 años, pero a su jovencísima edad tiene una madera de líder innegable.

Madera de capitán

A los 19 años se convirtió en el capitán más joven de toda la historia de un club con la exigencia del Ajax, y el brazalete no le pesó en absoluto, llevando a su equipo a la semifinal de la Champions. Después, prefirió la Juventus al Barça porque los italianos le ofrecieron más dinero, pero no se ha acabado de encontrar cómodo y lo más probable es que salga en verano.

Es uno de los líderes de la selección neerlandesa / EFE

La Juve pedirá una cifra cercana a los 75 millones de euros, y aunque el Barça debería negociar para conseguir un mejor acuerdo, sigue habiendo un problema de encaje. Ni Xavi Hernández ni Joan Laporta se plantean forzar una salida de Piqué, que se ha ganado jugar en el Barça hasta que él quiera, pero lo cierto es que si el central decidiera dar un paso al lado, sería el encaje perfecto para De Ligt.

Con la renovación de Umtiti hasta 2026 para poder inscribir a Ferran Torres, y la presencia de Eric y Araujo como apuestas de futuro y de la casa, solo quedan Lenglet y Piqué. El ex del Manchester United, a sus 34 años, sigue siendo el mejor defensor del equipo, pero por simple edad, es el que está más próximo a retirarse. El Barça lo echará de menos cuando decida hacerlo, pero quizá poder fichar a De Ligt haga un poco más dulce esa transición obligada.