La posición que está más y mejor cubierta en el FC Barcelona para la temporada 2022-23 es la de defensa central. El fichaje de Andreas Christensen como agente libre ya era una declaración de intenciones, pero Xavi Hernández quería más y Mateu Alemany ha cumplido sus deseos con la incorporación de Jules Koundé, que aunque también puede jugar de lateral derecho, su posición natural es el eje de la defensa. Una situación parecida a la de Ronald Araujo, que no deja de crecer a pasos agigantados, y sin olvidar a Eric Garcia, en su segunda temporada de culé y tras haber firmado una gran pretemporada. Y además, el eterno líder de la línea defensiva: Gerard Piqué.
Gerard Piqué no apunta a titular para Xavi Hernández
O quizá el adjetivo de eterno haya pasado a mejor vida. Porque el central barcelonés no parte como titular, a priori, para Xavi Hernández. Además, el discurso del entrenador siempre que es preguntado por él es bastante neutro, sin rastro de la relación de amistad que entablaron cuando eran compañeros de equipo. Xavi no se casa con nadie, y así lo explica. "Todo el mundo parte de cero, todo el mundo a competir, aquí no valen nombres, vale el rendimiento, vale el resultado y en eso estamos", aseguró el entrenador tras uno de los partidos de la gira en los Estados Unidos.
Y es que fue el propio Xavi quién le comunicó a Piqué, al final del pasado curso, que si seguía en el equipo no tendría el mismo rol, a lo que el central respondió con contundencia. "Tráeme al mejor central del mundo, que vendrá para ser suplente", espetó Piqué, un hombre de ideas claras. Siempre ha defendido que no quiere retirarse siendo suplente, y, de momento, lo es. Su vida fuera del terreno de juego no está pasando sus mejores épocas, con la separación de Shakira, y las dudas sobre si sus hijos se irán a Miami con su madre.
No quiere retirarse siendo suplente
La vida personal puede pasar factura, y el principio de temporada no llega en un momento fácil. Si no quiere ser suplente, tiene dos opciones. Asumir que, de inicio probablemente lo sea pero trabajar para dejar de serlo, o buscar una salida. Siempre ha dicho que quiere retirarse en el Barça, pero, como ya se ha explicado, quiere colgar las botas siendo importante, dos ideas que pueden acabar siendo incompatibles. Queda un mes de mercado, y cuando se cierre ya se llevarán tres jornadas de liga, por lo que se podrá deducir una tendencia sobre su importancia en el equipo.
Piqué es un futbolista, y una persona, bastante impulsiva, y aunque durante todo el verano se ha mostrado con un perfil bajo, trabajando en silencio y sin decir una palabra más alta que otra, hasta que no sea oficialmente imposible, no puede descartarse al 100% que sondee las opciones que le ofrece el mercado. Sabe que no le faltarían ofertas para seguir jugando en la élite, pero supondría un shock enorme verlo con otra camiseta que no sea la blaugrana.