Joan Laporta ha dado un nuevo giro al futuro de la portería del FC Barcelona al estar cerca de cerrar un acuerdo que parecía improbable hace apenas unos meses. Wojciech Szczesny, quien llegó como una solución de emergencia tras la grave lesión de Marc-André ter Stegen, podría firmar una renovación que lo mantendría ligado al club hasta 2026. Este movimiento, liderado por Deco y avalado por Hansi Flick, asegura estabilidad en una posición clave para el equipo azulgrana.
El guardameta polaco, quien se retiró oficialmente al finalizar la pasada temporada, aceptó el reto de regresar al fútbol profesional para cubrir la vacante dejada por Ter Stegen. A pesar de no haber disputado aún ningún minuto, su impacto en el vestuario ha sido notable. Con una actitud ejemplar y un compromiso absoluto, Szczesny ha demostrado ser un líder silencioso dentro del equipo, ganándose el respeto tanto de sus compañeros como del cuerpo técnico.
La decisión de extender su vínculo hasta 2026 responde a la confianza que Deco y Flick tienen en la necesidad de contar con tres porteros de calidad en la plantilla. Con Iñaki Peña consolidándose como una opción sólida y la esperada recuperación de Ter Stegen, el Barça busca blindar su portería ante posibles imprevistos, como lesiones o sanciones. En este sentido, la continuidad de Szczesny aporta experiencia y seguridad a un equipo que sigue compitiendo al máximo nivel en todas las competiciones.
El rendimiento de Iñaki Peña, quien finaliza contrato en 2026, también será evaluado a lo largo de la temporada. Aunque el alicantino ha dado pasos importantes en su desarrollo, la presencia de un veterano como Szczesny será clave para mantener la competitividad en la portería. Desde el club, además, se confía en que Ter Stegen recupere su mejor nivel tras su rehabilitación, lo que refuerza la necesidad de mantener una plantilla equilibrada en esta posición.
A nivel económico, la renovación de Szczesny no representa un problema para el club, ya que el polaco aceptó unas condiciones salariales muy ajustadas al límite financiero del Barça. Esto demuestra su compromiso con el proyecto y su deseo de seguir contribuyendo al equipo, independientemente de si su rol principal es en el campo o como apoyo desde el banquillo.
Ahora, la atención estará puesta en cómo Flick gestiona la rotación en la portería, especialmente en competiciones como la Copa del Rey o la Supercopa de España. Estas podrían ser las oportunidades para que Szczesny demuestre que, a sus 34 años y tras volver del retiro, todavía puede ser decisivo en la élite del fútbol mundial. El acuerdo hasta 2026 asegura que el Barça tendrá una portería bien cubierta en los próximos años.