El Girona ha estado a punto de conseguir una gran gesta en el Parque de los Príncipes de París, pero ha acabado perdiendo por la mínima ante el PSG en su debut en la Champions League (1-0). El conjunto catalán, demostrando el porqué juega la máxima competición europea, habría podido acabar empatando —o hasta ganando el partido— pero su portero Paulo Gazzaniga ha acabado cometiendo un error fatal en un final de partido muy cruel para el Girona.

Batalla táctica en París

El Girona, con el experimentado Cristhian Stuani como capitán y gran líder, y once de gala en el PSG, con la referencia del exblaugrana Ousmane Dembélé. Dos planteamientos con muchos kilómetros en el primer nivel y buscando dominar una misma idea sobre el césped. Un Girona sin nervios ha tenido que correr de inicio después de las carreras constantes del PSG y la creciente euforia en la grada.

Luis Enrique Martínez dando indicaciones a sus jugadores / Foto: EFE

Pero es que en lo que se ha convertido el partido ha sido en una auténtica batalla táctica de Míchel Sánchez contra Luis Enrique Martínez. Los catalanes han tenido algunos problemas para salir desde de atrás, pero la seguridad ha ido apareciendo y lo que parecían dudas se han convertido en pequeñas victorias morales. Warren Zaïre-Emery y Marco Asensio han intentado disparar, y Bradley Barcola y Dembélé han aportado peligro y mucha velocidad.

El Girona, sin embargo, ha sabido igualar las fuerzas porque a nivel físico ha sido superior y también ha estado muy atento en defensa. Los catalanes, picando piedra y a la suya, poco a poco se han ido acercando a la portería rival. Y sin ningún tipo de precipitación, los mejores minutos del Girona han llegado pasada la media hora de juego, mareando a los franceses con una posesión de más de tres minutos. Pero sin muchas oportunidades y con solo la lesión de Asensio como destacado justo antes del descanso.

Oriol Romeu luchando un balón con Achraf Hakimi / Foto: EFE

El Girona cede ante el asedio del PSG

Pero es que si la primera parte ha sido una batalla táctica por no encajar, en el segundo tiempo ha llegado la batalla táctica para marcar. El Girona ha arrancado con mucha más intención ofensiva y ha estado a punto de conseguir el gol mediante Stuani y Donny van de Beek. Y por primera vez ha tenido que intervenir el portero rival Matvei Safonov.

El partido, sin embargo, ya se había roto, con más espacios y con oportunidades claras para los dos equipos. Y en un contragolpe de libro del PSG, con Dembélé como protagonista, ha tenido que aparecer providencialmente Ladislav Krejčí, nuevo defensa del Girona, que ha parado al exblaugrana cuando ya estaba dentro del área gerundense y delante de un creciente Gazzaniga. Precisamente, el portero argentino del Girona ha sido más protagonista y ha hecho grandes paradas, evitando con el larguero el primer gol del PSG. Y viendo el desbarajuste, Míchel ha aplicado cambios, dando entrada a Portu, Arnaut Danjuma, Yáser Asprilla y Jhon Solís.

Portu luchando una posesión con Joao Neves / Foto: EFE

Ida y vuelta constante, con mucha velocidad sobre el césped, y con el PSG sintiéndose más cómodo. El Girona ha plantado cara y resistido hasta el minuto 90, cuando Gazzaniga se ha comido un centro lateral de Nuno Mendes que se le ha acabado colando entre las piernas (1-0). Y a pesar de la derrota final, muy cruel para los catalanes, meritorio debut del Girona en la Champions League.