El Girona jugará la fase de ascenso a Primera División. Este viernes, el conjunto de Francisco Rodríguez superó el Cádiz en Montilivi (2-1) gracias a dos dianas del pichichi, Cristhian Stuani, y ató matemáticamente una plaza del play-off. Paralelamente, sin embargo, el Huesca superó el Numancia en el Acoraz (3-0), de manera que los aragoneses amarraron la segunda posición para volver a la categoría reina sólo un año después de haberla abandonado por la puerta de atrás.
Stuani, siempre Stuani
Si el Girona todavía tiene aspiraciones de ascenso es, en gran parte, gracias a Stuani. Este viernes, y delante de un Cádiz con resaca después de haber certificado su ascenso la pasada jornada, el punta uruguayo sumó dos nuevas dianas para llegar hasta los 29 goles en una temporada. No sólo es el mejor delantero de la categoría, también es el mejor jugador. En Montilivi le tendrán que hacer un monumento.
El '7' rojiblanco estrenó el marcador en el minuto 23 gracias a una definición letal. Fali regaló la pelota a Gerard Gumbau en fase de construcción y el mediocampista gerundense, con un gran pase al espacio, habilitó a Stuani, quién se deshizo del portero visitante con un autopase y firmó el 1-0.
A partir de este momento, el Girona dominó con cierta solvencia y el Cádiz, con los deberes hechos, no buscó el empate a la desesperada, precisamente. Siguiendo la tónica marcada por Francisco, el conjunto de Montilivi volvió a priorizar la protección de su propia portería.
Otro penalti
En la segunda parte, sin embargo, el Girona volvió a provocar un penalti, hecho que ha pasado de manera sistemática en casi todas las jornadas postconfinamiento. Esta vez, por unas manos inocentes de Duarte, del filial andaluz, cuando acababa de entrar en el terreno de juego. Stuani no falló desde los once metros y situó un 2-0 que parecía definitivo.
El trabajo estaba prácticamente terminado cuando Johan Mojica, a siete minutos del final del tiempo reglamentario, cometió un penalti más que riguroso sobre Salvi por un golpe de brazo que además le costó la expulsión. El árbitro, con la ayuda del VAR, no dudó y señaló una pena máxima que Álex Fernández, hermano de Nacho Fernández, del Real Madrid, convirtió en el 2-1. Afortunadamente para el Girona, sin embargo, el partido se acabó sin sobresaltos. El único incidente antes del silbido final, de hecho, fue la expulsión del visitante Alberto Perea, quien debió decir algún insulto muy grave a Alejandro Múñiz Ruiz, porque este lo envió a la calle sin miramientos.
El Girona afrontará la última jornada de la Liga SmartBank en cuarta posición, por detrás del Almería, tercero, y por delante de Zaragoza y el Fuenlabrada, los otros equipos en play-off. Este lunes los gerundenses visitan el Alcorcón en Santo Domingo y optan a la tercera posición, hecho que le permitiría enfrentarse al sexto con el factor campo a favor en la primera ronda de la fase de ascenso.