Se estrenaba el Girona en su retorno a Primera División con la sorpresa de Cristhian Stuani en el banquillo. El ariete uruguayo ha salido en la segunda parte, pero no ha podido evitar la derrota de los suyos. El Valencia ha sido superior en todo el partido. Incluso con la expulsión de Eray Cömert el Girona no ha sido capaz de encontrar la portería de Giorgi Mamardashvili. Así pues, el Girona inicia su andadura en la Liga con una derrota, gracias al gol de Carlos Soler de penalti.
Un solitario gol condena al Girona
El Girona de Michel ha salido a Mestalla con las ideas muy claras. El conjunto catalán, muy bien plantado, ha tratado de sorprender al Valencia. Tras unos primeros minutos de tanteo entre ambos equipos ha sido el nuevo Valencia de Gennaro Gattuso quien ha tomado la iniciativa del partido. Aún y así no ha conseguido generar demasiado peligro en la portería defendida por Juan Carlos.
De hecho, ha sido el Girona quien ha tenido las primeras ocasiones claras del partido. Los gerundenses, que han hecho una buena primera parte, gracias, en parte, al buen hacer de Rodrigo Riquelme, han conseguido inquietar a Giorgi Mamardashivili en más de una ocasión. Pero con el paso de los minutos ha sido el Valencia quien ha llevado el peso del partido.
Los de Gattuso han encontrado un filón por banda izquierda con Samuel Lino, que ha hecho las delicias de Mestalla con sus arrancadas. Ha sido él el que ha agitado la coctelera del partido y suyas han sido las primeras ocasiones valencianistas. El Valencia quería el partido y, justo antes del descanso, ha llegado el gol. Una falta lanzada por Samu Castillejo impactaba en la mano de Valery. Penalti claro a favor del Valencia que se encargaba de materializar Carlos Soler. Un gol psicológico para el Valencia y que ha puesto al Girona contra las cuerdas.
Un Girona con uno más no es capaz de inquietar al Valencia
La segunda parte ha empezado bien para los intereses del Girona. El Valencia se ha quedado con un hombre menos después de una fea entrada por detrás de Eray Cömert. Tenía que dar un paso adelante el Girona y Michel ha decidido arriesgar con los cambios, no le quedaba otra. Se esperaba que el Girona incidiera más a una defensa valencianista en inferioridad numérica, que se ha sentido muy cómoda.
Nada más lejos de la realidad, como era de esperar, los de Montilivi han tenido el control del balón, pero han estado demasiado espesos de ideas. Ha sido el Valencia el que ha estado más cerca del gol con algún zarpazo a la contra de Lino y Castillejo. No ha sufrido, prácticamente, el Valencia, que ha estado muy sólido durante todo el encuentro.
Se nota la mano de Gattuso en este nuevo Valencia. Un equipo muy intenso, con garra y con mucho carácter. Un Girona muy gris se ha estrellado con un conjunto che muy sólido. Los de Michel Sánchez tendrán que esperar para llevarse los primeros puntos de la Liga. Pero deberán mejorar mucho sus prestaciones en los siguientes partidos si no quieren sufrir en exceso.