Jugar en el Barça no es cosa fácil. No solo se tiene que tener un gran nivel futbolístico, sino poder soportar la presión y las expectativas que se ponen. Cuándo el rendimiento no es inmediato, llegan las dudas, y el mercado fluctúa a toda prisa. Un día eres imprescindible para el equipo y en el siguiente estás haciendo las maletas. Este jugador, que llegó en enero para ser la gran estrella del club, no ha demostrado el nivel suficiente para continuar en la plantilla azulgrana, y Flick ya ha pedido a Laporta su venta.
Con solo 19 años, Vitor Roque podría poner rumbo a la liga de Arabia Saudí. El Barça, que inicialmente quería ceder al jugador, ve como el interés del Al Hilal podría cambiar esta decisión. El delantero brasileño estaría muy cerca de dejar el club e, incluso, dejar beneficios con su venta. Todavía no ha llegado ninguna oferta, pero Laporta es conocedor que hay interés por el jugador en la Saudi Pro League.
Una venta es más atractiva que una cesión
El club quería que el jugador se pudiera marchar cedido a un club menor, pero todavía a Europa, donde pudiera tener minutos y ganar experiencia. Una de las opciones que sonaba con más fuerza era la de la Lazio, que sigue negociando una cesión con opción de compra, pero el Barça todavía no quiere aceptar la oferta ante la posibilidad de ganar más dinero con un movimiento fuera del continente.
De momento, el jugador viajará a los Estados Unidos con toda la plantilla para participar en la pretemporada. No será hasta una vez acabe el torneo que el club dará su respuesta. El Barça no esconde que una venta ayudaría mucho a mejorar la situación económica del club. Para fichar a otros jugadores, tienen que vender algunos, y el dinero que pueden aportar desde la liga árabe es muy superior al que pueden recibir desde cualquier liga europea por un jugador como Vitor Roque.
No ha cumplido las expectativas
El brasileño llegó en enero procedente del Paranaense del Brasileirao como la gran promesa del fútbol mundial. Los 60 millones que puso sobre la mesa el club azulgrana significaban unas expectativas gigantes sobre el joven delantero. El rendimiento no fue el esperado desde el inicio, y solo empeoró con el paso de los días. Hacia finales de temporada, Xavi Hernández no contaba con el jugador ni para disputar minutos en partidos menores.
Sus 2 goles en 14 partidos no han convencido a Flick, tampoco. Lo que ha podido ver al técnico alemán en los primeros entrenamientos de la pretemporada no ha sido prometedor, y ya ha avisado en el club de que quiere que el jugador se marche antes de empezar el curso. El Barça no quería deshacerse completamente del brasileño, para ver si, con más minutos en un equipo inferior, se conseguía adaptar mejor al fútbol europeo. Pero cualquier oferta procedente de Arabia será escuchada.