Pep Guardiola es el entrenador del Manchester City, pero también un reconocido barcelonista. Además, el técnico de Santpedor, que siempre ha demostrado su amor eterno por el Barça, mantiene una excelente relación con Joan Laporta, del cual es amigo. Es por ello que Guardiola jamás haría nada que pudiera perjudicar al Barça, aunque por ello tenga que renunciar a mejorar la plantilla del Manchester City.
Y el entrenador del City no lo ha demostrado solo con palabras, sino que ya lo hizo con hechos, cuando se mostró reacio a fichar a Leo Messi la temporada pasada, cuando el argentino, tras enviar el famoso burofax al Barça de Bartomeu, le pidió a su padre y representante que moviera hilos para recalar en el Manchester City, para volver a ser entrenado por Guardiola. "La salida de Messi del Barcelona ha sido una sorpresa para todos. El presidente ha sido muy claro explicando los motivos. No he hablado con ninguno de los dos. No sé qué ha pasado. Cuando tienes unas pérdidas tan grandes tienes que tomar decisiones. Messi no entra en nuestros planes", afirmó el técnico tras el anuncio del Barça de que no podía renovar a Messi.
El último ofrecimiento al City de Guardiola
Y el destino ha querido poner de nuevo a prueba el barcelonismo de Guardiola. Jorge Mendes, representante de Ansu Fati, quiere forzar al Barça a llevar a cabo una renovación al alza del canterano antes de que el jugador vuelva de su lesión de rodilla, no sea que desgraciadamente la recuperación no sea todo lo buena que se espera.
Es por ello que Mendes, tal y como ha podido saber ElNacional.cat, está ofreciendo al jugador a varios gigantes de Europa, para intentar asustar al Barça y que, de este modo, el club blaugrana acepte cerrar la ampliación y mejora de contrato de Ansu Fati lo antes posible.
Guardiola no piensa perjudicar al Barça
Uno de los clubes contactados ha sido el Manchester City. Obviamente, Ansu Fati sería un fichaje de lujo para Guardiola, pues a la increíble calidad del futbolista hay que añadir los sincronismos adquiridos tras tantos años en la Masia, por lo que su adaptación a los esquemas de Guardiola sería instantánea. Aún y así, el entrenador ya le ha pedido a Txiki Begiristain que no entre en el juego iniciado por Mendes, pues en ningún caso quiere perjudicar al Barça, que en estos momentos intenta superar una de las situaciones más delicadas a nivel económico de toda su historia.
El gesto de Guardiola ha sido muy bien recibido por Joan Laporta, que está muy molesto con Jorge Mendes y que espera que Ansu Fati haga un paso al frente ante los intentos interesados del representante y acepte una renovación a la baja.