Pep Guardiola empieza a trazar el plan de futuro por si decide quedarse en el Manchester City. Aunque su contrato termina al final de esta temporada, la posibilidad de una nueva renovación empieza a sonar con fuerza en su entorno. Si bien muchos esperaban que el técnico catalán diera por finalizada su etapa en el club inglés, Guardiola está meditando cuidadosamente la opción de seguir al frente del proyecto citizen. Y si lo hace, no tiene pensado quedarse quieto en el mercado de fichajes.

El entrenador ya tiene dos nombres clave en mente que podrían revolucionar al equipo y, de paso, dar un golpe sobre la mesa. El primero es Xavi Simons, una joven promesa que está deslumbrando en la Bundesliga. El neerlandés sería el elegido para sustituir a Kevin De Bruyne, que podría estar barajando la opción de marcharse a Arabia Saudí. Guardiola ve en Simons a un jugador que encaja perfectamente en su filosofía de juego: dinámico, con calidad técnica y una capacidad de adaptación increíble. El centrocampista, que se formó en La Masía, ya está en la mira de los grandes equipos de Europa, y su fichaje sería todo un golpe de efecto para el City.

Pero no es el único movimiento que Guardiola tiene en mente. El segundo gran objetivo del técnico es Jamal Musiala, el joven prodigio del Bayern Múnich. Musiala es una de las mayores sensaciones del fútbol europeo en los últimos años y su estilo de juego lo convierte en una pieza deseada por muchos clubes. Guardiola lo quiere en su equipo para seguir manteniendo al Manchester City en la élite del fútbol mundial. Sin embargo, aquí es donde entra el conflicto: Joan Laporta también tiene el nombre de Musiala marcado en rojo en su agenda. El presidente del FC Barcelona ve en el alemán al jugador ideal para reforzar el centro del campo culé y está dispuesto a hacer un esfuerzo para traerlo al Camp Nou.

Musiala en el Alemania-Hungría EFE

Este interés compartido podría provocar un duelo entre dos de los clubes más poderosos del mundo. Para Laporta, perder la batalla por Musiala sería un duro golpe, sobre todo porque el club azulgrana necesita dar un salto de calidad en el extremo. Y el hecho de que Guardiola esté tras el joven alemán, alguien a quien Laporta quiere vestir de azulgrana, añade aún más tensión a la situación.

El próximo mercado de fichajes podría ser decisivo para ambos clubes. Si Pep Guardiola decide quedarse en el City, Joan Laporta podría ver cómo dos de sus grandes deseos se le escapan. Con Xavi Simons y Jamal Musiala en la mira, Guardiola tiene un plan claro, y el presidente del Barça tendrá que actuar rápido si no quiere quedarse sin sus objetivos.