Viktor Gyökeres se ha consolidado como el delantero más codiciado de Europa y ahora, también, como la gran prioridad del FC Barcelona para el próximo mercado de verano. La explosión del sueco en el Sporting de Portugal, donde ha demostrado un instinto goleador temible, ha llevado a Joan Laporta y a Deco a fijarse en él como el sustituto ideal de Robert Lewandowski, quien en verano cumplirá 37 años. Sin embargo, el posible fichaje de Gyökeres ha traído consigo un gran dilema para la dirección deportiva azulgrana y un potencial conflicto en el vestuario.

El delantero sueco ya ha dejado clara su postura: quiere llegar al Barça como titular indiscutible, sin tener que competir por el puesto con Lewandowski. Gyökeres entiende que sus mejores años como delantero se encuentran por delante y que necesita ser el hombre de referencia en cualquier equipo que fiche sus servicios. Deco, consciente de este requisito, sabe que convencer a Gyökeres para que recale en el equipo de Hansi Flick requerirá una solución en torno a la figura de Lewandowski. No es una decisión fácil para el Barça; la salida del polaco, quien aún mantiene un nivel extraordinario, se plantea como un reto tanto en lo deportivo como en lo financiero, dado su contrato actual.

Robert Lewandowski i Hansi Flick durant un partit del Barça / Foto: Europa Press

Robert Lewandowski, además, no parece estar en disposición de facilitar el camino. El delantero ha expresado en varias ocasiones su intención de cumplir el año de contrato que le queda con el club, y su rendimiento esta temporada ha sido más que destacable. A pesar de su edad, sigue siendo una pieza esencial en el esquema de Flick y un líder en el vestuario. Para Deco y Laporta, esto significa no solo encontrar un equipo dispuesto a asumir la ficha del polaco, sino también convencer a Lewandowski de que su ciclo en el club llega a su fin, algo que no será fácil si el jugador desea quedarse.

Mientras tanto, el Barça observa con interés cómo Gyökeres continúa aumentando su valor en el mercado a base de goles. Deco sabe que si el sueco sigue rindiendo al nivel que ha mostrado esta temporada, otros grandes clubes europeos se lanzarán a por él, y la competencia se incrementará de manera exponencial. El Sporting de Portugal ya ha dejado entrever que el traspaso no será sencillo, aunque el delantero cuenta con una cláusula de salida de unos 70 millones de euros, una cifra considerable pero inferior a la que demandarían por otros delanteros de su nivel.

El Barça tiene ahora la difícil tarea de gestionar este "incendio" interno, buscando la forma de despedir a uno de sus grandes goleadores recientes para darle paso al que podría ser su próximo gran delantero. Deco y Laporta deben tomar una decisión que balancee el presente con el futuro del club.