Earling Haaland parece haber encontrado su hábitat perfecto en el Manchester City. El delantero noruego está pulverizando récords goleadores. A sus 23 años ya se ha convertido en uno de los mejores delanteros del mundo y de la historia. Sin ir más lejos, este curso suma 5 asistencias y 19 goles en 21 partidos. Mientras que el curso pasado lo cerró con 52 goles y 9 asistencias en 53 partidos. Una auténtica bestia.
Por el momento Haaland seguirá en el City. Allí está cosechando lo que le faltaba, títulos. Tiene un sueldo difícil de igualar por otros clubes. Y su contrato expira en junio de 2027. Sin embargo, no se descarta que antes de que acabe su contrato, el City decida abrirle las puertas. Sobre todo si, llegado el momento, se muestra reticente a renovar. No lo dejarán ir gratis. De hecho, varios medios aseguran que tiene una cláusula de escape, impuesta por él mismo, para salir si llega una oferta que ronde entre 200 y 250 millones de euros.
El Real Madrid no pierde de vista a Haaland
Uno de los clubes que estaría encantado de hacerse con sus servicios es el Real Madrid. Ha rondado el entorno madridista en más de una ocasión. Pero al margen de que Florentino Pérez considera demasiado dinero lo que tendría que pagar por su traspaso, a lo que hay que sumar primas a terceros y un sueldo estratosférico, el delantero no quiere recalar en el Santiago Bernabéu. De venir a España, prefiere el FC Barcelona. Y tiene un motivo de peso para esta elección.
Porque como todo el mundo sabe, el objetivo prioritario del Real Madrid, pese a los plantones y puñaladas, es Kylian Mbappé. El delantero francés tiene contrato con el Paris Saint-Germain hasta junio de 2024. Y aunque tiene opción para alargarlo un año más, todo apunta a que, esta vez sí, abandonará el PSG, siendo el Madrid el principal candidato para hacerse con sus servicios. Una posibilidad que es lo que aleja a Haaland del Madrid.
El Real Madrid no cuadra con los objetivos de Haaland
El ariete quiere ser la máxima estrella. Sus aspiraciones pasan por el Balón de Oro y no quiere competencia. Y con Mbappé en el Madrid, este objetivo sube enteros en dificultad. No quiere compartir protagonismo con ningún crack. Y menos con Mbappé, el otro gran candidato a llevarse el próximo Balón de Oro. Un problema con el que, en cambio, no se encontraría en el Barça, donde sería la máxima estrella destacada desde el primer día.