Jugar a fútbol y demostrar lo que realmente vales. Esto es lo que piden los grandes clubs a los grandes futbolistas, pero muchas veces no es posible llegar a cumplir lo que se te exige. Y, precisamente, esto es lo que le está pasando a Eden Hazard, que no acaba de convencer al Real Madrid.

Dudas con Hazard

El jugador belga aterrizó en el Santiago Bernabéu, pero por culpa de la falta de regularidad y, sobre todo, por culpa de las lesiones, su aportación al club blanco ha sido mucho menor a lo esperado inicialmente. Se calcula que el fichaje de Hazard podría haber costado cerca de 160 millones de euros, pero lo que realmente ha aportado no vale ni la mitad de lo que pagaron por él en el 2019.

El caso es que Hazard tiene un problema mayúsculo que lo sitúa en la puerta de salida del Real Madrid. No será titular y su sueldo no va en consonancia con el rol que se espera de él en esta temporada. Por esto, en el caso de recibir alguna propuesta formal y que pueda ser interesante a nivel económico, podrían abrirle la puerta de par en par al futbolista belga. Sin embargo, parece que Hazard está preocupado en triunfar vistiendo de blanco.

Eden Hazard jugando contra el Barça / Foto: EFE

Hazard será suplente en el Real Madrid

Después del partido de Las Vegas contra el Barça, en el cual Hazard fue titular y actuó como falso 9, se confirmó que el jugador belga no sirve para actuar como referente de la delantera. Le falta físico, aprender a moverse y también ser efectivo de cara a portería. Esto quiere decir que Hazard es mucho mejor jugando de extremo que en el eje del ataque.

Pero el gran problema es que Hazard será suplente de Vinícius Júnior. No jugará como delantero centro, ya que Karim Benzema es titular y se está buscando a un suplente de garantías. Tampoco actuará como extremo derecho, ya que esta posición está reservada para Rodrygo Goes y para Marco Asensio. Así pues, el sitio que le queda es el de extremo izquierdo, pero allí Vinícius es el titular indiscutible.

Eden Hazard durante un partido del Real Madrid / Foto: Europa Press

Por lo tanto, cada vez es más evidente que Hazard será suplente habitual y que tendrá muy pocas oportunidades. Sí que se le espera en las segundas partes, pero tampoco hay nadie que pueda garantizar que físicamente no sigue siendo de cristal y que puede completar una temporada sin lesiones. El club blanco tendrá que decidir si apostar por él y mantenerlo en el equipo a pesar de saber que será suplente o quizás buscarle un lugar lejos del Santiago Bernabéu. Lo que sí es seguro es que Hazard cada día también tiene más claro que quiere triunfar en el Real Madrid.