En el Real Madrid ya hace tiempo que dieron por perdido a Eden Hazard. El mediapunta belga, que no hace tanto tiempo era considera el tercer mejor jugador del mundo, tras Messi y Cristiano Ronaldo, es una sombra del que brilló en el Chelsea y por el que el Real Madrid pagó 115 millones de euros. Hazard ya empezó mal su etapa en el club blanco, pues en la pretemporada del 2019 ya aparecieron imágenes de él en las que se le veía fuera de forma, con sobrepeso. A todo ello siguieron las lesiones, con recaídas, que en algunos casos fueron atribuidas a que el jugador no estaba en su mejor estado físico.
Lejos de huir de los mitos sobre su estado de forma, Hazard no dudó en bromear sobre ello, participando en una campaña publicitaria en la que se le veía enloqueciendo ante unas hamburguesas. Hasta el mismísimo Rey Felipe de Bélgica, en un encuentro con Hazard, hizo broma sobre ello. "No comas demasiadas hamburguesas, eh", le dice el monarca. "Claro, con patatas. Eso es básico", le responde Hazard entre risas.
Hazard y su pasión por las hamburguesas
La leyenda de Hazard como jugador poco deportista surge en el 2012, cuando el belga decidió ir a celebrar su fichaje por el Chelsea con Mavuba, compañero suyo en el Lille, un día antes de un partido. “Decidimos ir a tomar algo y se nos fue de las manos. A la mañana siguiente, Eden todavía estaba borracho. No durmió, bebió toda la noche y metió un hat-trick en treinta minutos”, explicó tiempo después Mavuba. La historia jamás ha sido admitida por Hazard que, en cambio, no duda en aceptar otra de las leyendas que circulan sobre él. En el 2011, en un partido entre Bélgica y Turquía, el jugador aprovechó que fue sustituido en el minuto 60 para irse con unos familiares a comerse unas hamburguesas. El acto llegó a oídos del seleccionador, Georges Leekens, que lo sancionó sin jugar los dos próximos partidos.
"La salsa de esa hamburguesa era mi preferida… Todavía le pido a mi madre que me traiga de vez en cuando a Londres. Cometí una estupidez. La historia de la hamburguesa… Aún nos reímos. Es lo que me convirtió en leyenda de la selección”, confesó Hazard años después en una entrevista a RTBF.
Hazard, a Segovia a comer cochinillo
Y ahora, en Madrid y fuera de los planes de Carlo Ancelotti, Eden Hazard no esconde su pasión por la comida. El pasado lunes, un día después del Clásico contra el Barça y festivo en Madrid, el belga se desplazó hasta Segovia, al Mesón de Cándido, para degustar el mítico cochinillo segoviano.
El belga no solo no se escondió, para evitar la crítica que, como era obvio, iba a recibir, sino que no dudó en fotografiarse con los responsables del afamado mesón. "¡Mirad quién ha comido hoy en el Mesón de Cándido! Gracias Hazard, jugador del Real Madrid, por acercarte a probar nuestro cochinillo". Como era de esperar, la fotografía no ha hecho gracia en el Real Madrid, donde cada vez tienen más claro de que el verano que viene no podrán traspasar a un Hazard que cada día que pasa tiene un valor inferior en el mercado.