A medida que pasa el tiempo, siguen revelándose algunos detalles que permanecían ocultos de la salida de Marc Márquez del HRC Honda Factory Team, una noticia que conmocionó a todo el mundo a finales de 2023. Porque el ilerdense decidió renunciar al año de contrato que le quedaba, a pesar de que percibía un salario estratosférico de 25 millones de euros al año, siendo el piloto mejor pagado de la parrilla, y de toda la historia del motociclismo.
Pero esto no fue un impedimento para que el ‘93’ decidiera poner punto y final a su relación con la fábrica japonesa, con la cual compitió durante toda la vida, y fue capaz de ganar hasta seis títulos de MotoGP. No le importó que siempre le apoyaran durante los años en los cuales estuvo lesionado, y se tuvo que operar en varias ocasiones, y quiso irse para probar suerte en otro lugar, donde pudiera tener una moto mucho más competitiva, con el Gresini Racing Team como destino final.
Tanto el de Cervera como Honda mostraron en todo momento un respeto mutuo, y ambas partes agradecieron por todos los servicios prestados. Pero se ha revelado que desde Tokio hicieron todo lo posible para que el catalán cambiara de opinión, y permaneciera en el equipo, poniéndole encima de la mesa una oferta prácticamente irrechazable a nivel económico, y que pocos pilotos se hubieran atrevido a descartar. Pero el hermano mayor de Álex Márquez sí lo hizo.
Siendo más exactos, le ofrecieron renovar por cuatro años más, manteniendo su increíble sueldo, es decir, que podría haberse embolsado un total de 100 ‘kilos’ en caso de respetar este vínculo. Sin embargo, Marc en ningún momento tuvo dudas, y el aspecto financiero no fue una cosa importante en su decisión, ya que quería recuperar la confianza en sí mismo, y demostrar a la gente que aún estaba preparado para pelear por victorias.
Y el tiempo ha dado la razón a Márquez, pues fue capaz de ganar tres carreras en el año 2024, y finalizar tercero en el Mundial, y esto le sirvió para dar el salto al Ducati Lenovo Team, el equipo oficial, donde ha comenzado arrasando, como se vio en el primer Gran Premio de la temporada, en Tailandia.
Márquez, un caso opuesto al de Fabio Quartararo
Como hemos comentado, muy pocos pilotos son capaces de rechazar una oferta económica tan elevada, y el ejemplo más evidente de esto lo podemos encontrar con Fabio Quartararo.
A pesar de mostrar públicamente su decepción con Yamaha, y negociar con fábricas como Aprilia o KTM, finalmente acabó renovando su contrato hace aproximadamente un año, después de que le ofrecieran un salario de unos 12 millones por campaña.