Buena parte de los jugadores de la selección francesa que aspiran a revalidar el título levantado hace cuatro años y medio en Rusia son hijos o nietos de inmigrantes que llegaron a Francia huyendo de una guerra o de una situación económica y social difícil de afrontar. En este sentido, son especialmente conocidos los casos de Mbappé, con padre nacido en el Camerún, Ousmane Dembélé, de padre malí y madre de ascendencia senegalesa y mauritana o Camavinga, que con solo 1 año se tuvo que marchar de Angola con sus padres a causa de una guerra que estaba arrasando su país.
No obstante, lo que no conoce a mucha gente es la historia de la familia de Hugo Lloris, que tuvo que vivir una situación parecida a la de Camavinga. Y es que los abuelos paternos del actual portero del Tottenham Hotspur eran catalanes y tuvieron que emigrar al sur de Francia para huir de la Guerra Civil Española y del franquismo. Los 'Lloris' se instalaron en Niza y allí empezaron a hacer fortuna. Hay que destacar que el actual capitán de la selección francesa, a diferencia de lo que sucede con muchos de sus compañeros de selección que han tenido que crecer en barrios más modestos, proviene de una familia burguesa, con un padre banquero especialista en inversiones y una madre abogada en un bufete inglés.
Un portero que en Qatar quedará como unos de los más emblemáticos de los Mundiales
Ahora bien, este último hecho no ha desviado nunca en Lloris de su objetivo principal: triunfar en el mundo del fútbol. A pesar de que también tenía grandes dotes para jugar al tenis y que sus padres le habían recalcado en varias ocasiones durante su etapa formativa que la prioridad siempre tenían que ser los estudios, el portero francés insistió mucho hasta poder llegar a un pacto con sus padres para aceptar la oferta en que tenía de la Niza a cambio de seguir estudiando.
Acompañado siempre de los consejos financieros y personales de sus padres, el capitán del combinado francés se convertirá en la final contra la Argentina en el portero con más presencias en las 22 ediciones de la Copa del Mundo. Y no solo eso, porque si Francia acaba derrotando a la albiceleste, el arquero galo también será el primer capitán de la historia que alza dos veces el trofeo. Solo Italia (1934-38) y el Brasil (1958-62) han sido capaces de revalidar el título mundialista de manera consecutiva, pero en aquellas ocasiones hubo cambio de brazalete entre edición y edición en las selecciones campeonas.
Está dibujando una trayectoria de leyenda a la selección
Pero los récords que está batiendo Lloris en estos partidos que está disputando en la vigente Copa del Mundo van más allá de registros mundialistas. El capitán de la selección dirigida por Didier Deschamps ya es historia viva de la selección francesa. Considerado por el gran público como el mejor portero galo que han tenido Les Blue, después del partido contra los ingleses de cuartos de final ya ha pasado por delante de Lilian Thuram para encabezar la lista de jugadores con más partidos oficiales de la selección francesa, con 143. Unos números conseguidos gracias a la disciplina que le ha dado su descendencia, diferente de la de sus compañeros de selección, pero también con una historia escondida detrás.