El Barça se ha convertido en un especialista a la hora de incorporar a jugadores a coste cero. La delicada situación económica del club ha obligado a tener que apostar por la llegada de cracks con la carta de libertad, dejando atrás esos días en los cuales hacían inversiones astronómicas por los mejores futbolistas del planeta. Y gracias a esta política de contrataciones, en los últimos años han llegado Memphis Depay, Eric García, Sergio ‘el Kun’ Agüero, Franck Kessié, Andreas Christensen, Marcos Alonso…
También Ilkay Gündogan e Íñigo Martínez, que han sido los casos más recientes, y este verano desembarcaron en el Camp Nou después de que finalizaran sus compromisos con el Manchester City y con el Athletic Club de Bilbao, respectivamente. Una lista que se podría haber ampliado con Marcus Thuram, quien fue ofrecido a Joan Laporta y a Mateu Alemany en múltiples ocasiones, aunque finalmente decidieron no hacer ninguna ofensiva.
La razón es simple, y es que Xavi Hernández no dio el OK. No consideraba que estuviera preparado para formar parte de la plantilla, y mucho menos para tener un rol protagonista. Pese a que Robert Lewandowski no tenía una alternativa de garantías en el vestuario, y sigue sin tenerla, hasta que no pueda ser inscrito Vítor Roque, el entrenador catalán rechazó sin pensárselo dos veces a la estrella del Borussia Mönchengladbach, quien también fue vinculado con el Atlético de Madrid.
Asimismo, el Paris Saint-Germain, el Borussia Dortmund, el Chelsea, el Liverpool, el Manchester United o el Bayern de Múnich tenían el nombre del internacional galo en los planes, pero se decantó por aceptar la propuesta del Inter de Milán. Allí le garantizaban ser titular habitual, después de las salidas de Romelu Lukaku y de Edin Dzeko, convirtiéndose en el socio de lujo para Lautaro Martínez.
Y en Italia, Thuram ya se ha convertido en uno de los ídolos de la afición ‘neroazzurra’, gracias a la rápida adaptación que ha tenido, y al buen rendimiento que ha mostrado en sus primeras semanas.
Thuram, intocable para Simone Inzaghi
Aunque este verano también firmaran a Alexis Sánchez y a Marko Arnautovic, Thuram se ha erigido en una pieza indispensable para Simone Inzaghi, gracias a los dos goles y a las seis asistencias que acumula por ahora. A sus 26 años, se puede considerar como un acierto rotundo por parte de la directiva del Giusseppe Meazza.
Y un error grave del Barça, y más concretamente, de Xavi.