Elena Fort, vicepresidenta institucional del Barça, ha denunciado a través de sus redes sociales la aparición de una pancarta nazi en las gradas del estadio Luis II de Mónaco. Aficionados del propio conjunto blaugrana exhibieron durante el debut del equipo en la Champions League un mensaje en el que aparecía la frase "Flick Heil".
En su traducción literal, es un saludo al técnico culé, Hansi Flick, pero esta hace referencia a "Sieg Heil", una frase alemana que se utilizaba en el contexto del Tercer Reich. Su significado, "saludo a la victoria", iba muy ligado al famoso "Heil Hitler", y es que ambas frases se utilizaban como signos de adoración a Adolf Hitler.
Indigno. Vergonzante. Asco y tristeza que alguien quien dice querer al Club actue así.
— Elena Fuerte ���� ����❤️ (@Fortelena) September 20, 2024
Todo tiene un límite.
No se puede devolver a repetir nunca más. Nunca más. https://t.co/NJGHEWizO4
Elena Fort: "Indigno, vergonzoso"
Elena Fort, a través de su cuenta de X, ha compartido su indignación con respecto a una pancarta motivada por el (absurdo) humor de los aficionados: "Todo tiene un límite. Indigno, vergonzoso. Asco y tristeza que alguien que dice querer al Club actúe así. No se puede volver a repetir nunca más. Nunca más", denunciaba la directiva.
Por el momento todavía no ha habido represalias hacia los aficionados culés que mostraron la pancarta, pero se prevé que se tomen medidas similares a las que recayeron sobre los dos aficionados que hicieron el saludo nazi en París el pasado mes de abril. En ese entonces, el Barça suspendió cautelarmente la condición de socios de los dos desafortunados protagonistas.
La absurdidad del humor de unos pocos mancha la imagen de toda una afición
El brillante inicio de temporada del Barça llevó a 500 aficionados culés a las gradas del estadio Luis II de Mónaco para vivir el debut de los suyos en la Champions. No obstante, unos pocos fanáticos con un humor absurdo e irracional han ensuciado, no solo la actitud de todo el resto, sino la imagen de un club que se encuentra en plena remontada en el aspecto deportivo, económico e institucional.
El Barça, que cada vez tiene más y mejores medios para competir en las primeras dos esferas mencionadas, lucha también contra el virus Negreira que ensucia su imagen. Joan Laporta, presidente de la entidad catalana, siempre ha defendido la inocencia del club y ha remarcado que se busca ensuciar la imagen del Barça desde fuera. Si son aficionados propios quienes tiran por tierra también su reputación a nivel social, mal.