Isco Alarcón es uno de los grandes caramelos del mercado de verano. El malagueño ha jugado poco en su última etapa en el Real Madrid, pero aún y así tiene un gran mercado, pues con 30 años puede ser un futbolista espectacular si recupera la forma y la confianza. Isco tiene ofertas de grandes clubes europeos, pero su intención es la de quedarse en la Liga española. Habló con el Barça, pero el pacto de no agresión entre Laporta y Florentino rompió la operación.
Y ahora ha trascendido que Isco ha iniciado contactos con el Atlético de Madrid, un club que le puede ofrecer una ficha interesante y seguir luchando por todos los títulos, con el añadido de que el malagueño podría seguir viviendo donde hasta ahora, evitar una mudanza y la adaptación a una nueva ciudad. Para Simeone sería un refuerzo espectacular, pues Isco le daría magia entre líneas, además de una motivación extra para demostrar su nivel y para ganarse un hueco en la lista de Luis Enrique para el Mundial de Qatar.
El Atlético de Madrid quiere a Isco
Los rumores, claro está, no han gustado en el Real Madrid, pues estaban convencidos de que Isco se iría a la Premier League, desde donde ha recibido llamadas del Armamento y del Newcastle, o a Italia, donde interesa a la Juventus y al Milan. Y no solo eso, pues Isco también sabe que Sevilla, Betis, Villarreal y Valencia también le acogerían con los brazos abiertos, opciones que el jugador no ha descartado, pues podría estar cerca de Málaga, su tierra natal, o volver a su club de formación, el Valencia, donde no pudo despuntar todo lo que se esperaba.
La llamada del Atlético de Madrid lo puede cambiar todo, pues al Real Madrid no le haría gracia ver a Isco a las órdenes de Simeone, pues si el argentino lo recupera puede ser una incorporación de altísimo nivel para un equipo que ya tiene una plantilla espectacular.
Isco-Ancelotti, una mala relación
El último tramo de Isco en el Real Madrid ha sido un calvario. El malagueño quiso irse el verano pasado, pero Carlo Ancelotti le pidió personalmente que se quedara. A la hora de la verdad, sin embargo, el italiano no contó con él, lo que molestó muchísimo a Isco, que entró en un bucle peligroso, el de la desidia, generando todavía una mayor animadversión por parte de Ancelotti.
El momento culminante se vivió en el Granada-Real Madrid. Isco estaba en el banquillo y recibió la orden de que saliera a calentar junto a otros compañeros. Tras la pertinente secuencia de calentamiento, Ancelotti anunció los primeros cambios, pero ninguno de ellos fue el de Isco, que enfadado decidió dejar de calentar y volver al banquillo. Viendo la situación, Ancelotti reaccionó dando entrada al jugador al terreno de juego. Las cámaras lo habían captado todo y el paso de Isco por el Real Madrid había llegado a su final.