Isco Alarcón fue una de las sorpresas del pasado fin de semana, cuando el Sevilla decidió anunciar su fichaje contra todo pronóstico. Porque ya hacía tiempo que no se escuchaba nada sobre las negociaciones, y muchos pensaban que Monchi había optado por descartar la operación. Sin embargo, y para alegría de Julen Lopetegui, finalmente podrá contar en sus filas con el mediapunta malagueño, que ha llegado totalmente gratis.
Y es que dejó de pertenecer al Real Madrid el pasado 30 de junio, después de que finalizara su contrato. Desde entonces, había estado buscando trabajo, pero ningún equipo parecía tener interés en él. Solamente el Betis llegó a consultar con su agente, pero rápidamente los de Manuel Pellegrini se olvidaron del internacional español, después de conocer las elevadas exigencias económicas que tenía, y que eran completamente inasumibles.
Al ex de Málaga y Valencia no le quedó de más remedio que intentar encontrar un comprador ofreciéndose a diversos conjuntos. Y como muchos ya saben, uno de los equipos que recibió su llamada fue el Barça. Joan Laporta se quedó sorprendido después de que el atacante de 30 años se pusiera en contacto con él, pero argumentó que buscaba una venganza contra Florentino Pérez y Carlo Ancelotti por el trato que había recibido.
Aunque la cosa no fue a más. En el Camp Nou rápidamente respondieron a Isco que no estaban interesados, debido a que no consideraban que tuviera espacio en la plantilla. Xavi Hernández desaconsejó la llegada de su ex compañero en ‘la Roja’, pues tenía claro que estaba lejos de su mejor nivel, y que ya tenía su posición más que cubierta. Además, no querían romper el pacto entre caballeros que tienen con el Madrid desde hace tiempo.
Pero hay otro motivo de peso para que los azulgranas fueran tan contundentes con Alarcón, y ese es la mala fama que se ha creado, y que le ha llevado a ser duramente criticado.
Isco, cuestionado por sus compañeros y su afición
No se puede olvidar que Isco protagonizó varios escándalos en el Madrid, llegando a ser cuestionado por su comportamiento, su poca profesionalidad y su nulo compromiso a la hora de mantenerse en forma. Así que el Barça prefirió olvidarse de su fichaje rápidamente.
“Ningún compañero cree en Isco, un jugador de gran calidad técnica, pero con grandes dobleces como persona dentro del vestuario, donde se le considera por algunos como un traidor. Es un futbolista de gran calidad técnica, pero de informes negativos como persona” señaló el periodista Juan Luis Galiacho en 2016.
En el Sevilla también están advertidos con Alarcón.