El poco minutaje y el bajo rendimiento mostrado cuando tenían que mostrar su valía ha destinado a Marcelo Vieira, Gareth Bale e Isco Alarcón a marcharse del Real Madrid con la carta de libertad. En el caso del galés, era el futbolista con el sueldo más alto de la plantilla y Florentino Pérez quería liberar su alta ficha con el fin de hacer hueco en la masa salarial para nuevos fichajes.
Mientras tanto, Marcelo no era una de las fichas más altas, pero su papel sobre el césped cuando Ferland Mendy estuvo lesionado fue muy deficiente. De hecho, Zinédine Zidane ya apostó antes por Miguel Gutiérrez que por el veterano brasileño, mientras que Carlo Ancelotti hacía uso de Nacho Fernández con el fin de no tener que alinear a Marcelo.
Isco tampoco estaba al nivel del Real Madrid
El caso de Marcelo era mucho más extremo, pero Isco Alarcón también demostró no tener el nivel suficiente para continuar en el Real Madrid. Desde su falta de con respeto en el campo del Granada, Ancelotti decidió apartarlo del equipo, le hizo la cruz.
De añadida, el hecho de que fuera el séptimo mediocampista de la fila no ayudaba, Aparte de los titulares Carlos Casemiro, Toni Kroos y Luka Modric, los Fede Valverde, Eduardo Camavinga e incluso Dani Ceballos eran más importantes para Carlo Ancelotti a la hora de distribuir minutos.
Isco Alarcón se arrepentirá siempre de rechazar Florentino Pérez
No es ningún secreto para nadie que el punto final de la carrera de Isco Alarcón como merengue llegó a raíz de la decisión de Florentino Pérez de no renovarle el contrato. El caso es que su última renovación fue en el mes de septiembre de 2017, pero rechazó una propuesta de Florentino con el fin de prolongar una vinculación que caducaba el pasado 30 de junio de 2022.
Florentino Pérez también le haría la cruz, porque el mediapunta malagueño rechazaría su oferta de renovación a la baja. Florentino quería bajarlo de escala salarial de acuerdo con su poco protagonismo y con los 30 años con que ya cuenta. Ahora Isco se arrepiente de haberla rechazado, porque ni Sevilla ni Betis, entidades que han preguntado a sus agentes por él, pueden permitirse contratarlo.
Creía que alguien le podría pagar más de que el presidente del Real Madrid le ofrecía, pero lo cierto es que no ha encontrado a nadie que se acerque a sus pretensiones salariales.