Una de las grandes razones que llevó a Leo Messi al Paris Saint-Germain fue el gran número de amistades que tenía en el vestuario. Leo Paredes, Ángel Di María, Neymar Junior… todos convencieron al astro argentino, que rechazó una oferta del Manchester City para irse a Francia. Pero, tan solo unos meses después, ya podemos decir que las cosas no están yendo como todos esperaban. Ni a nivel colectivo, ni a nivel individual, pues el ganador del último Balón de Oro está decepcionando.
Sus cifras distan mucho de las que tenía en el Barça, y el proceso de adaptación que está teniendo es mucho más lento de lo que se podía esperar. Lógico, por lo tanto, que haya tenido que comenzar a soportar algunas críticas. E incluso hay medios que están acusándole de ir a la Ligue 1 a retirarse, y de no tener la misma ambición que tenía antes. Esto ha hecho que Nasser Al-Khelaïfi tenga que intervenir, y tomará cartas en el asunto.
Es el primero que no está satisfecho por como está rindiendo el ‘30’, y le exige mucho más. Para eso, cree que será necesario rodearle mejor, y hacer un equipo a su medida, comenzando por el entrenador. Mauricio Pochettino no ha acabado de convencer nunca, y será destituido a final de curso, a no ser que consiga conquistar la Champions League. Y la cosa no se quedará allí, porque el jeque también tiene previsto una renovación del vestuario, no solo con la salida de Kylian Mbappé.
También quiere echar a otras ‘vacas sagradas’ que no están dando la talla, y que no tienen una influencia positiva en el resto de compañeros. El caso más evidente es Neymar, que no ha dejado de acumular lesiones y problemas extradeportivos desde que aterrizó en el Parque de los Príncipes. Es incuestionable su talento, y es uno de los mejores del planeta, pero es incapaz de jugar más de 10 partidos seguidos. Por esa razón, no justifica su salario.
Neymar Junior/ EFE
En el PSG cree que el brasileño no hace ningún bien a Messi, y que el de Rosario rendiría mucho mejor si él no estuviera.
Messi se opondría a su venta
Obviamente, a Leo no le haría ni pizca de gracia escuchar que uno de sus mejores amigos se irá del PSG. Pero, contra todo pronóstico, el propio ‘Ney’ no acaba de ver con tan malos ojos la idea de iniciar una nueva aventura en otro equipo, donde sí pueda ser la referencia ofensiva y la gran estrella.
Así que se repetiría la historia que ya se vivió en 2017, cuando dejó el Barça. Al-Khelaïfi se ha hartado del fichaje más caro de todos los tiempos, 222 millones de euros costó en su día, y eso tendría consecuencias.
Messi espera que todo quede en nada.