El fundador y copropietario de Mediapro, Jaume Roures, carga con dureza contra la directiva del Barça, habla sobre la figura de Sandro Rosell y se moja en relación al 'BarçaGate' en una entrevista en el diario Sport.
Sobre el club blaugrana, Roures apunta que "tiene una deuda astronómica y un problema económico gravísimo" y que "no tiene los recursos para resolverlo". "Cuando se habla de fichajes me suelo reír. No hay dinero en la caja, es una realidad. En parte por la deuda, que es irresponsable, en parte por la masa salarial, y en parte porque el club ha entrado en una dinámica de pérdidas", añade.
La guerra con Rosell
Por otra parte, el máximo mandatario de Mediapro vuelve a responder con contundencia cuando se le pregunta por el expresidente del Barça Sandro Rosell, quien lo acusó de ser uno de los responsables de la prisión preventiva que sufrió durante dos años.
Rosell sospecha que Jaume Roures pudo estar detrás de sus problemas con la justicia. Y va a llegar hasta el final para averiguarlo #LoDeRosell pic.twitter.com/v7EQF0BoRk
— Lo de Évole (@LoDeEvole) May 3, 2020
"No me sorprende porque lleva tiempo diciéndolo. Yo lo relaciono con el juicio pendiente por el espionaje del que fuimos víctimas por parte de Rosell y sus acólitos, es una manera de desprestigiar. No quiero activar el ventilador, pero sí contestar algunas cosas concretas: lo que dice Rosell no es verdad", apunta.
Por otra parte, Roures niega que su empresa interfiriera en el documental dedicado al caso Rosell que TV3 estrenó el domingo pasado. "A nosotros no nos preguntó nadie, se habla mucho de rigor periodístico, pero si se tenía que hablar de nosotros, nos podrían haber preguntado. No fue el caso", dice.
La presidencia blaugrana y el 'BarçaGate'
Por otra parte, Roures descarta tajantemente presentarse a las elecciones del Barça del próximo 2021 o dar apoyo a algunos de los candidatos. "No me interesa por nada. Hago cosas más interesantes que perder el tiempo con estas tonterías. Y Tatxo Benet también. Este mundo no me interesa, es muy difícil de cambiar. Se dice que los clubs son de los socios, pero tendría que matizarse: los socios pintan muy poco". Y añade: "Preferiría que el Barça fuera una sociedad anónima, pero eso no quiere decir que se tenga que hacer de un día por el otro. No nos engañamos, el Barça no es de los socios. El socio sólo tiene capacidad para votar cada seis años. Y las asambleas... que 200 personas voten un presupuesto de mil millones, eso no puede ser, no es representativo".
Por último, el responsable de Mediapro también se moja en relación al 'BarçaGate', la trama de desprestigio a la oposición, jugadores y figuras como el mismo Robles que la directiva del Barça llevó a cabo a través de perfiles falsos en las redes sociales. "Dudo de que se publique un informe en el cual salgan los auténticos responsables. Se fraccionaron los contratos a fin de que no tuvieran que pasar por junta, eso ya no lo discute nadie. Estos contratos los tiene que firmar un consejero delegado, y un consejero delegado no participa en esta operación si no tiene instrucciones claras", dice.
Por último, sobre Emili Rousaud, quien se había postulado como candidato continuista y finalmente fue forzado a dimitir (y potseriormente denunciado), Roures también ha dicho la suya. "El delfín no le caía demasiado bien a alguien. Él se equivocó cuando dijo que alguien había puesto la mano en la caja, más que nada por el contenido de la expresión. Fraccionar contratos o pagar más de la cuenta es administración desleal, pero no poner la mano en la caja para llevarse dinero. Cualquier tontería demuestra que la junta es muy frágil. Se cargan el delfín en cuatro días", sentencia.