La mala racha del Barcelona en la Liga ha encendido las alarmas en la dirección deportiva y ha llevado a Joan Laporta a replantearse los movimientos previstos para el mercado de fichajes. Los últimos resultados, con derrotas inesperadas y una falta evidente de pegada en ataque, han hecho que el presidente tome cartas en el asunto. Laporta está decidido a dar un golpe de efecto y adelantar la incorporación de un fichaje estrella en enero. Y el nombre que ha irrumpido con fuerza es el de Rafael Leao, el delantero del AC Milan.
El ataque del Barcelona ha mostrado ciertos problemas en los últimos partidos, con Lewandowski lejos de su mejor nivel y demasiada dependencia de las individualidades de jugadores como Raphinha y Lamine Yamal. Es por eso que Joan Laporta y Deco, en sintonía con las peticiones de Hansi Flick, han decidido buscar un refuerzo que aporte potencia, velocidad y desequilibrio en el frente ofensivo.
Rafael Leao, uno de los nombres más destacados de la Serie A, encaja perfectamente en este perfil. El portugués ha demostrado en el AC Milan ser un jugador capaz de decidir partidos con su talento y físico imponente, características que el Barcelona necesita urgentemente. Además, el jugador ya ha mostrado en varias ocasiones su deseo de jugar en el Camp Nou, lo que facilita las negociaciones.
Sin embargo, el fichaje de Rafael Leao no será sencillo. El AC Milan considera al delantero como una pieza clave y no tiene intención de dejarlo salir fácilmente. Aunque el jugador tiene contrato hasta 2028, su voluntad de vestir de azulgrana podría ser clave para forzar una salida.
En cuanto a lo económico, el Barcelona tendrá que hacer auténticos malabares para encajar la operación dentro del límite salarial impuesto por LaLiga. La fórmula podría incluir una cesión inicial con opción de compra obligatoria, algo que permitiría al club aplazar el grueso del gasto. Además, se valora la posibilidad de incluir jugadores en la negociación para reducir el coste, con nombres como Ferran Torres o Eric García sobre la mesa.
Para Joan Laporta, el fichaje de Rafael Leao no solo sería una solución deportiva, sino también un movimiento estratégico para recuperar la ilusión de la afición y consolidar al equipo en la pelea por los títulos. El presidente es consciente de que enero será un mes crucial, y traer a un jugador del calibre del portugués podría marcar un punto de inflexión en la temporada.
Queda por ver si el Barcelona logra cerrar esta operación en un mercado de invierno que promete ser agitado. Lo que está claro es que Laporta no está dispuesto a quedarse de brazos cruzados mientras el equipo atraviesa su peor momento en meses.