El pasado verano, Marc Guiu tomó una decisión arriesgada: abandonar el FC Barcelona para unirse al Chelsea por 6 millones de euros. El joven delantero, que había sido una de las promesas de La Masia, creyó que su progresión en el Barça se vería limitada por la presencia de Robert Lewandowski. Así, optó por iniciar su aventura en la Premier League, donde esperaba tener un papel destacado en el equipo londinense. Sin embargo, las cosas no han salido como esperaba.
Desde su llegada a Stamford Bridge, Guiu ha encontrado muchas dificultades para adaptarse. A pesar de sus grandes expectativas, el catalán ha tenido muy pocas oportunidades de demostrar su talento y, hasta el momento, solo ha conseguido anotar un gol en toda la temporada. La intensa competencia y el estilo de juego en la Premier League han hecho que su proceso de adaptación sea mucho más complicado de lo previsto. Esto ha provocado que, desde su entorno, se empiece a hablar de que la decisión de salir del Barça podría haber sido un error.
En Barcelona, la salida de Guiu fue vista con cierta decepción, pues se trataba de un talento en crecimiento que podía haberse beneficiado del aprendizaje junto a Lewandowski y, eventualmente, ocupar un lugar importante en el primer equipo. Sin embargo, la postura del presidente Joan Laporta en estos casos es clara y contundente: aquellos jóvenes que eligen dejar el Barcelona en busca de dinero o aventuras rápidas en otros equipos no encuentran el camino de vuelta al club. Laporta ha sido tajante al respecto en varias ocasiones, y en el caso de Marc Guiu no ha sido la excepción.
Para Laporta, lo primordial es la lealtad y el compromiso con el proyecto del Barça. Desde su punto de vista, los jugadores que no estén dispuestos a luchar y esperar su oportunidad en el equipo blaugrana demuestran una falta de compromiso con los valores que él considera esenciales para vestir la camiseta culé. Por ello, el presidente ya ha dejado claro que, mientras él esté al mando, Guiu no volverá al club, independientemente de lo que suceda en su carrera.
Esta firmeza en la posición de Laporta es, en cierto modo, un mensaje para el resto de las jóvenes promesas de La Masia: el camino más rápido o atractivo a nivel económico puede terminar siendo el menos adecuado para su desarrollo. Al final, lo que Laporta busca es construir un equipo de jugadores comprometidos con el escudo y que se identifiquen plenamente con el FC Barcelona. La situación de Marc Guiu es un recordatorio de que tomar decisiones precipitadas puede cerrarte puertas importantes.