Todo lo que podía salir mal, lo ha hecho, para los intereses del Barça. Las malas noticias, con respecto al enfrentamiento de vuelta de los cuartos de final entre los blaugrana y el Eintracht de Frankfurt han empezado mucho antes del partido. En las horas previas, disturbios en los aledaños del Camp Nou entre un grupo de aficionados alemanes con los Mossos de Escuadra y los Boixos Nois han hecho saltar todas las alarmas.
Unos 30.000 seguidores alemanes en el Camp Nou
Además, una vez las gradas del Camp Nou se han empezado a llenar, se ha visto lo que estaba a punto de pasar. De los 79.468 asistentes al partido, aproximadamente 30.000 eran seguidores visitantes, según ha publicado la cuenta oficial en español del club en twitter. La afición blaugrana ha acabado muy cabreada, y muchos de ellos han pedido responsabilidades al presidente, Joan Laporta.
Y el presidente se ha pronunciado después del partido, en las cámaras de Barça TV, y lo ha hecho con un tono muy duro. "Ha sido una vergüenza que no se puede volver a repetir. Tenemos gran parte de la información de lo que ha pasado, pero necesitamos tiempo para procesarla", ha empezado lamentando el presidente blaugrana, que ha salido a hablar con la idea bien clara de lo que quería transmitir.
"Tomaremos medidas. Es indignante y vergonzoso, y tendremos que ser mucho más estrictos. Lo que tenemos que hacer es no permitir según qué situaciones que siempre se han hecho," ha asegurado, refiriéndose a la "reventa masiva" que el club ha admitido a ElNacional.cat.
Laporta, avergonzado por el esperpento vivido en la grada
Laporta, ha querido hablar como presidente pero también como barcelonista, intentando expresar lo que han sentido aquellos que hoy han asistido al Camp Nou queriendo que el equipo que ganara fuera el Barça. "Como culé, estoy avergonzado de lo que he visto. Había muchos aficionados del otro equipo y menos de los nuestros. No se tendría que haber producido nunca esta situación y no se producirá nunca más. Ha sido muy grave", ha reiterado.
El presidente blaugrana ha afirmado, una y otra vez que el club ha recogido toda la información que le ha proporcionado el departamento de seguridad y de ticketing, para poder adoptar una decisión en firme, y con todo el conocimiento de lo que ha pasado. "Tomaremos medidas y las explicaremos", ha concluido, antes de enviar un mensaje a la afición para el próximo partido en casa, en cuatro días contra el Cádiz.
"Tenemos que pasar este mal trago y esto sigue. Pido que la gente venga, esta vez, por favor, a animar el equipo," ha concluido, con rostro serio, el mismo que ha tenido durante toda su intervención.