El caso Dembélé ha dado un espectacular giro de 180 grados. Y es que el extremo francés ha pasado de tener un pie y medio fuera del Barça a estar cerca de renovar, después de que los últimos acontecimientos hayan hecho cambiar de opinión a todos los implicados, tanto al club como al propio jugador. Todo ello ha provocado que este lunes Mateu Alemany haya cogido un avión para desplazarse a Marrakech a reunirse con Moussa Sissoko, el representante de Dembélé, que tiene negocios en la ciudad. La noticia, que ha sido adelantada por el periodista Gerard Romero, ha quedado confirmada cuando Alemany ha sido cazado en el aeropuerto de la ciudad marroquí.

El gran problema, además de que en la dirección deportiva del Barça siguen sin fiarse de las idas y venidas de Dembélé, es que el club teme que el extremo francés ya ha firmado algún tipo de documento que le vincula con el PSG, lo que incluso podría obligar a Dembélé a pagar algún tipo de indemnización si se desdice. El objetivo es conocer de primera mano la situación y, si es posible, buscar una solución sin que el Barça salga perjudicado.

Xavi, dando órdenes a Dembélé / EFE

Dembélé quiere seguir en el Barça

Ousmane Dembélé ha tardado, pero finalmente se ha dado cuenta de que en ningún club iba a ser más feliz que en el Barça. Tiene la confianza plena de Xavi Hernández, que le está enseñando a gran velocidad los mecanismos del sistema, mientras que el vestuario lo trata como si fuera una gran estrella. Y no solo, pues la afición ha pasado de silbarle a despedirle con una sonora ovación contra el Sevilla, demostrándole que se le quiere. Todo ello ha provocado que Dembélé haya decidido seguir en el Barça.

Para ello, el jugador deberá aceptar un contrato por debajo de sus expectativas, que además se podría ver más reducido si existe, como se teme, una cláusula con el PSG, Laporta entiende que Dembélé debe seguir, tanto porque el jugador está explotando, como porque su renovación es más barata que cualquiera de los fichajes que se están estudiando. No será fácil, pero la renovación de Dembélé con el Barça está más cerca que nunca de ser una realidad.

Adama Traoré, en el partido contra el Nápoles del Camp Nou / EFE

Adama, el gran sacrificado

El gran perjudicado del cambio de guión es Adama Traoré, que no seguirá en el Barça si Dembélé acaba renovando. Con Ferran Torres, Ansu Fati, Dembélé y el fichaje previsto para los extremos, no queda espacio para Adama, que al finalizar la temporada tiene todos los números de tener que volver al Wolves. La opción de compra es de 30 millones de euros, una cifra muy elevada que el Barça no piensa pagar, a no ser que Dembélé se fuera y que no acabara de convencer ninguna de las alternativas.

Con Dembélé renovado, nombres como los de Salah o Antony quedarán descartados, mientras que el Barça seguirá insistiendo en Raphinha, que será blaugrana si el Leeds acepta una rebaja de sus altas pretensiones. Si no, no se descarta que Abde pase al primer equipo, pues habrá piezas de nivel para competir de tú a tú con todos, y más si llega el delantero centro que está esperando Xavi.

 

Imagen principal: Joan Laporta está convencido de lograr construir una gran plantilla que pueda competir por todos los títulos / EFE