Joan Laporta ha ido de cara con un jugador del Barça, al cual ha pedido que sea totalmente sincero y transparente. Porque después de haber rechazado las últimas ofertas de renovación que le han presentado, Frenkie de Jong es uno de los asuntos que más dolores de cabeza están generando ahora mismo al presidente, y también a Deco. Tienen un problema muy grave, y están obligados a encontrar una solución el próximo verano como muy tarde.

Se arriesgan a perder a un futbolista de clase mundial sin percibir absolutamente nada a cambio, y no conviene olvidar que percibe la ficha más elevada del vestuario, por delante de Robert Lewandowski. La idea que tenían en el Camp Nou era ofrecerle la ampliación, y que aceptara rebajarse considerablemente el sueldo, pero es una idea que ha descartado por completo. Y comienzan a sospechar que ya estaría en conversaciones con otros clubes.

Frenkie De Jong/ EFE

E incluso, que tendría un acuerdo cerrado para dejar el proyecto de Hans-Dieter Flick. Creen que esto está influyendo en su rendimiento, que no ha estado a la altura de las exigencias durante las últimas semanas, motivo por el cual han dado la orden al técnico alemán que no juegue más. Porque ya tiene efectivos más que suficientes para ocupar la medular, con cracks como Pedri González, Marc Casadó, Dani Olmo o Fermín López, que sí están cumpliendo con nota.

Una cosa que el Barça quiere impedir cueste lo que cueste es que De Jong acabe diciendo adiós sin dejar ni un solo euro en las arcas. En su momento costó más de 85 millones de euros, una cifra que aún le coloca como uno de los traspasos más caros en la historia de la institución, y ahora no se pueden permitir el lujo de ver como hace las maletas totalmente gratis. Y no quieren que se revalorice más, para impedir que coleccione aún más pretendientes.

Frenkie de Jong

Laporta y Deco están muy decepcionados con la actitud de Frenkie y de su representante, y no acaban de entender la postura que ha adoptado.

De Jong se convierte en la ‘oveja negra’ del Barça

De Jong se ha convertido en la ‘ovega negra’ de la plantilla del Barça, debido a su increíble sueldo, su discreto rendimiento y sus constantes lesiones, que le han impedido tener continuidad a lo largo de los últimos meses.

Y la afición ha mostrado su enfado con el ex del Willem II y del Ajax de Ámsterdam, dedicándole abucheos y pitadas siempre que juega.