Joan Laporta pretende aprovechar el delicado momento que Leo Messi está viviendo en el Paris Saint-Germain. Después de ser eliminados por segundo año consecutivo en octavos de final de la Champions League, el ambiente que se respira en el vestuario es muy tenso, y todo el mundo sabe que la relación entre los jugadores no es nada buena. Hay dos clanes muy divididos, el de los sudamericanos y el de los europeos, que no beneficia en nada al equipo.
Tampoco hay ‘feeling’ entre Christophe Galtier y los pesos pesados de la plantilla, y la afición está muy enfadada con los resultados recientes que han obtenido. Así se volvió a comprobar con la derrota contra el Stade Rennais, que deja en evidencia la crisis institucional que se ha instaurado. Y uno de los más criticados está siendo el astro argentino, que se marchó entre silbidos y abucheos, y sin ni siquiera despedirse de la grada.
En el Barça no ha pasado desapercibido esto, y por ello tratarán de hacer todo lo posible para conseguir que el campeón del Mundial de Qatar vuelva a España. Es el objetivo prioritario que se han marcado, después de conocerse que las conversaciones con Nasser Al-Khelaïfi para firmar un nuevo vínculo están completamente paralizadas. Ahora mismo, parece casi inviable que el delantero de 35 años siga otra campaña más en el Parque de los Príncipes.
Por lo tanto, se marchará con la carta de libertad en el mes de junio, y buscará un nuevo desafío. Y Laporta quiere dar una alegría a Xavi Hernández y a los socios, consiguiendo lo que hasta hace poco tiempo era una utopía: que Messi vuelva a jugar en el Camp Nou. No es una operación sencilla, debido a las elevadas demandas económicas que tienen Leo y su padre y representante, Jorge Messi. Pero están dispuestos a hacer un esfuerzo.
Y de momento, le han trasladado una propuesta definitiva, con la esperanza de que den el OK, y viva una segunda etapa por La Liga Santander.
La oferta que Laporta pone sobre la mesa de Messi
Dos años de contrato es lo que Laporta ofrece a Messi, cobrando el salario mínimo, es decir, unos 200 mil euros al año. Eso es mucho menos de lo que gana en el PSG, donde percibe 40 millones de euros netos por temporada, aunque el Barça tiene un as bajo la manga.
Porque le prometen que cederán a Leo todos los ingresos que genere el partido de su despedida, que fácilmente alcanzarán los 100 ‘kilos’. ¿Será suficiente?