A Hansi Flick le encantaría entrenar al Barça. Así lo reveló hace unas semanas el periodista Fabrizio Romano y esta publicación no hizo más que acercar la figura del entrenador alemán al banquillo del Camp Nou. De hecho, según las últimas informaciones con respecto al futuro sustituto de Xavi Hernández, Joan Laporta habría descartado a Thiago Motta y Jürgen Klopp de entre la lista de candidatos, quedando como favoritos Roberto de Zerbi y Flick.

No obstante, el elegido para el rol de entrenador del Barça sería el exseleccionador de Alemania, un hombre mucho más contrastado, ganador de Mundial y de Champions League y que, con su llegada, impondría su manera de hacer, respetando un ADN Barça que tanta polémica ha levantado en los últimos días por las palabras de Deco mal transcritas por la revista portuguesa Nascer do Sol.

Hansi Flick, exentrenador del Bayern de Múnich / Foto: EFE

Hansi Flick tiene la aprobación de Deco y de Laporta

El director deportivo blaugrana a lo que se refería era a un cambio profundo en el rumbo del equipo, pero en nniguno de los casos hacía referencia al modelo de juego que el Barça practica y, ni mucho menos, que este hubiera quedado obsoleto, anticuado o que haya que cambiarlo. De hecho, tanto Xavi como Deco se habrían reunido este lunes para hablar de estas supuestas declaraciones, aclarando ambas partes que ven de la misma manera el fútbol de que tanto respeta el Barça y que así seguirá practicándose.

Hansi Flick se adaptaría a esta filosofía, pero el técnico alemán impondría su manera de entender el fútbol, destacándose sobre todo el área física. Y es que, desde que su nombre fue vinculado al banquillo del Barça, mucho se ha hablado de la capacidad física que siempre han tenido sus equipos y, como no podría ser de otra manera, esta se ha debido siempre a la importancia que Flick presta a la preparación en este aspecto.

Hansi Flick, dirigiendo un entrenamiento del Bayern de Múnich durante sus días al club alemán / Foto: Europa Press

Un cambio radical se entiende como positivo

Además, con su llegada, en el banquillo del Barça habría un cambio radical que, en este caso, se entiende como positivo desde el club. Los futbolistas dejarían de desconfiar en el proyecto y, aunque la confianza llegaría con los resultados, esta se tendría que tratar de fortalecer de nuevo a base de trabajo. Con todo, el problema de este posible cambio en el banquillo del Barça es que, según fuentes como El Chringuito de Jugones, este podría llegar incluso antes de la conclusión de la temporada, y con él, toda la inestabilidad que le podría seguir en un cambio de proyecto.