En las últimas semanas se ha especulado con que el FC Barcelona podría alcanzar por fin el deseado 1:1 para poder fichar sin tener problemas con las reglas que impone La Liga. Sin embargo, parece que todo va un poco más lento de lo previsto. Los aficionados azulgranas esperaban que después de la Eurocopa se pudieran cerrar los fichajes de Nico Williams (Athletic Club) y Dani Olmo (Leipzig), pero se están retrasando más de la cuenta debido a la falta de ingresos extra en este verano.
Por ese motivo, el presidente Joan Laporta ha decidido tomar cartas en el asunto y acelerar la operación salida debido a que la gira veraniega está a la vuelta de la esquina y no hay fichajes que mostrar ni camisetas nuevas de las que vender e ilusionar al barcelonismo. El máximo mandatario azulgrana espera solucionar esta semana próxima la salida de al menos dos jugadores.
Esos futbolistas que Laporta espera poder vender serían los brasileños Vitor Roque y Raphinha. Y con sus salidas conseguir una cifra entorno a los 80 millones de euros que pondrían muy de cara las contrataciones de Nico Williams, recordemos que posee una cláusula de rescisión de 50 millones de euros con el Athletic Club, y de Dani Olmo, por quien se especula que se podría conseguir por una cifra entorno a los 60 millones de euros.
¿Se recuperará el dinero invertido en Vitor Roque y Raphina?
Pese a que la cifra objetivo de 80 millones de euros por los dos futbolistas brasileños es elevada, no sería suficiente para recuperar la inversión que los azulgranas hicieron por estos jugadores. Cabe recordar que Vitor Roque llegó el pasado invierno por 31 millones de euros más 30 millones de euros en variables futuros y el coste de Raphinha pagado al Leeds United fue de 58 millones de euros más 7 millones de euros en variables.
Ante esos números Joan Laporta espera conseguir entre 35-45 millones de euros de Arabia Saudí por Vitor Roque y unas cifras similiares, aunque parece que algo inferiores, por Raphinha, quien parece que ha perdido cierto caché y ya han sido varios clubes de la Premier League que han rechazado su contratación si el Barça no bajaba sus pretensiones iniciales que oscilaban entre los 55-65 millones de euros por el internacional brasileño.