El Barça tiene una patata muy caliente entre manos con el caso de Gerard Piqué. El central se encuentra en una situación muy complicada, tanto en el apartado personal como en el profesional. Aunque todos los aspectos puedan estar relacionados, pues la vida personal afecta a la laboral, y vice versa, lo que nos atañe en esta noticia hace referencia al aspecto futbolístico del defensa blaugrana.
Gerard Piqué, pitado por la afición que tanto le ha idolatrado
Y esta parte de Piqué, la futbolística, está probablemente en uno de los momentos más delicados de su brillante carrera. Lo cierto es que Xavi Hernández ya le avisó cuando acabó la temporada pasada de que lo mejor para todas las partes sería que se planteara la opción de salir por la puerta grande, porque en el Barça pasaría a ser el quinto central de la plantilla y tendría muy complicado, por no decir imposible, volver a jugar de forma regular.
Piqué se negó a irse y prefirió quedarse para competir por un puesto que ha demostrado ya no estar capacitado para ocupar. Ha quedado señalado en partidos de máxima exigencia como contra el inter de Milan. Además, la afición lo pitó en el partido contra el Villarreal, evidenciando que la relación se ha ido deteriorando, con el riesgo de que pueda ir a más. Quiso salir en su defensa Xavi Hernández en la rueda de prensa posterior al duelo.
El Barça intentará que no agote su contrato
"Juegue o no juegue es un ejemplo en mayúsculas en el vestuario. Ni una mala cara. Es un ejemplo de capitán, y esto la gente lo tiene que saber. Si no fuera un ejemplo no diría nada", sentenció el técnico de Terrassa. No obstante, desde el club tienen una idea mucho más radical. Según detalla Sport, la idea del Barça es que Piqué no agote el contrato, que lo une al club de su vida hasta 2024, por varios motivos.
Primero, pensando en el equipo, deportivamente no es una pieza importante, mientras que económicamente, su contrato condiciona mucho la masa salarial, que en las próximas dos temporadas quieren reducir de 656 a 500 millones de euros. Pero además, porque Piqué no se merece salir por la puerta de atrás y siendo pitado por una afición que lo ha idolatrado durante casi 15 años. Para muchos, es el mejor central de la historia del club, y se corre el riesgo evidente de que mucha gente cambie su opinión por no haberse ido a tiempo. El escenario más probable es que se despida el próximo verano, aunque si surge la posibilidad de que su adiós sea este mismo invierno y convence a todas las partes, no se puede descartar que así sea.