Nadie en el Barça duda de que Jordi Alba todavía está en un estado de forma óptimo para aportar en el equipo, como demostró este domingo contra el Sevilla. El lateral izquierdo titular es Alejandro Balde, la apuesta de presente y futuro, pero eso no significa que Jordi Alba esté acabado, ni mucho menos. El gran problema es que el Barça necesita revolucionar la plantilla, para cambiar los roles dentro del vestuario y, lo que es más importante, necesita rebajar considerablemente su masa salarial.
Esta situación es la que indica que el verano que viene jugadores como Jordi Alba deberían aceptar una salida del club, por muy traumática que pueda parecer. La disyuntiva, pues, es enorme, ya que a todo ello se añade que Jordi Alba no tiene la más mínima intención de cambiar de aires, y para ello se acoge al contrato que firmó con Josep Maria Bartomeu en la presidencia. "No soy de dar mensajes. Cuando juego, aprovecho los minutos, y cuando no, me dedico a animar y ayudar a los jóvenes a que sepan lo que es jugar para este club", afirmó Jordi Alba después del partido contra el Sevilla.
Jordi Alba-Barça, visiones distintas
A punto de cumplir 34 años y con contrato hasta el 2024, el plan de Jordi Alba es el de agotar su vinculación contractual con el Barça, disputar la Eurocopa de Alemania que se disputa ese mismo verano y, acto seguido, tomar una decisión, dependiendo de su estado de forma y de las ofertas que le lleguen.
La idea de Jordi Alba choca con la de la dirección deportiva del Barça, que necesita desprenderse del lateral izquierdo. El puesto titular es para Alejandro Balde, que ha crecido exponencialmente, mientras que el suplente sería Marcos Alonso o, a las malas, algún fichaje de perfil bajo. El Barça sabe que Alba no lo va a poner fácil, aunque espera que con el paso de las semanas el jugador cambie de opinión.
Jordi Alba, salida necesaria
"Jordi Alba nos da mucho en ataque. Es un pasador. Hoy lo ha demostrado. Llega a la segunda jugada, al segundo palo. Es transcendental para el equipo", afirmó Xavi Hernández tras el partido contra el Sevilla. El entrenador, como es obvio, quiere la plantilla más competitiva posible, por lo que, si por él fuera, jugadores como Jordi Alba, Frenkie de Jong o Raphinha estarían en la lista de intransferibles. El gran problema es que el Barça deberá vender el próximo verano, para cuadrar las cuentas, y más si Xavi reclama fichajes, como es evidente que sucederá.
Para poder renovar la plantilla y superar las trabas de la Liga a la hora de inscribir jugadores, es obligatorio desprenderse de algunos, y alguna de estas salidas deberá ser traumática. En la lista de posibles bajas aparecen nombres como los de Ansu Fati, Ferran Torres, Raphinha, Frenkie de Jong o Jordi Alba. Si la situación económica fuera buena, Xavi podría disponer de todos ellos, pero la realidad es distinta y el entrenador deberá asumir que uno o dos de la lista tendrán que hacer las maletas.