La salida de Xavi Hernández tiene muchas implicaciones para la plantilla de cara a la temporada que viene. Son varios los jugadores que, según afirmaron algunas fuentes, lloraron al saber la noticia. Sergi Roberto, que tenía al técnico de Terrassa como su único valedor, es un ejemplo de aquellos jugadores que sin la protección de Xavi lo tendrán difícil para continuar.

Otros, en cambio, seguramente celebraron en la intimidad la salida del entrenador. El mayor beneficiado de este anuncio es Joao Félix, que en los últimos meses había perdido importancia en el equipo. Después de ser sustituido en el descanso del partido contra el Almería, el portugués lo había tenido muy difícil para contar con minutos en los partidos importantes.

Joao Félix con gesto de incredulidad / Foto: Europa Press

El deseo de Deco y Laporta

Cabe recordar que Xavi se negó a fichar al delantero, a pesar del deseo expreso de este de jugar en el Barça. Mientras que el técnico blaugrana no toleraba la irregularidad y los conflictos que había tenido con Diego Simeone en el Atlético de Madrid, Joan Laporta y Deco estaban encandilados con el talento del futbolista.

Ante la delicada situación económica del club, que le impedía traer refuerzos de garantías, al entrenador catalán no le quedó más remedio que aceptar su llegada en el último día de mercado en forma de cesión, de la misma forma que lo hizo Joao Cancelo. Aunque Joao Félix se mostró en los primeros partidos como la nueva estrella culé, su rendimiento fue decayendo con el tiempo hasta perder totalmente la confianza de Xavi. 

Joan Laporta y Deco, los grandes valedores de Joao Félix / Foto: EFE

Su gran oportunidad para quedarse

Con el de Terrassa fuera de la ecuación, se abre la ventana perfecta para el presidente y el director deportivo culés de intentar asegurar su continuidad en el club la temporada que viene. No será fácil, ya que el Atlético no lo dejará salir por una cifra inferior a los 60 millones de euros que necesitan amortizar del portugués y tampoco aceptará una nueva cesión. 

En cualquier caso, a la espera de saber quién ocupará el banquillo blaugrana, Joao Félix tiene una gran oportunidad para seguir cumpliendo su sueño. Sin embargo, este deberá seguir rindiendo al más alto nivel si no quiere que Laporta y Deco lo descarten de sus planes o que el futuro entrenador confíe en él. La lesión en el tobillo derecho que sufrió contra el Villarreal le ha impedido jugar después de saber la decisión de Xavi. Su respuesta en el campo a este nuevo escenario sigue siendo una incógnita de momento.