A Xavi Hernández se le están acumulando los problemas. A la falta de solidez defensiva del equipo y a las dificultades en la pizarra para suplir la baja de Sergio Busquets, le ha surgido ahora otra preocupación, la caída del rendimiento de Joao Félix. El centrocampista portugués, que no era prioritario para Xavi, empezó su etapa en el Barça como un ciclón, marcando contra el Betis y el Amberes, pero poco a poco ha ido desapareciendo, hasta mostrar una versión mucho más parecida a la que desesperaba a Diego Pablo Simeone.
A pesar de los problemas de adaptación, Xavi siguió apostando por Joao Félix, que fue titular en partidos transcendentales contra el Oporto, el Real Madrid o la Real Sociedad, pero el portugués no respondió a esta confianza con rendimiento. Está pasando desapercibido, hasta que Xavi decide sustituirlo, lo que ha sucedido en los últimos 4 partidos en los que ha sido titular. Joao Félix, además, entró como revulsivo en dos partidos complicados, en Hamburgo y en Vallecas, y en ambos no marcó las diferencias.
Joao Félix, de más a menos
El bajo rendimiento de Joao Félix no ha hecho más que darle argumentos a Xavi, que insistió hasta el último día de que la prioridad no era el portugués, sino la posición de mediocentro defensivo. Deco consideró que con Oriol Romeu y Frenkie de Jong ya era suficiente y promovió la llegada de Joao Félix, pues el jugador del Atlético de Madrid estaba en el pack de Joao Cancelo.
En un primer momento, la jugada le salió bien, ya que Joao Félix cayó de pie en el Lluís Companys, pero una vez el Barça ha entrado en la irregularidad, en el momento en el que los grandes jugadores deben tirar del carro, se ha visto que el portugués no está preparado para asumir un papel tan importante.
Un problema en el extremo izquierdo
Lo que Xavi ya tiene claro es que Joao Félix no debe seguir en el Barça la temporada que viene. El entrenador, que desconfiaba de un jugador que había sido rechazado por el Atlético de Madrid y el Chelsea, lo está intentando, sabe que el portugués tiene una calidad indudable. El problema es que Joao Félix tiende a desaparecer durante los partidos, a mostrar solo fogonazos, algo insuficiente en un equipo como el Barça, y menos si juega en uno de los extremos.
El gran inconveniente es que a Xavi Hernández tampoco le convence el sustituto de Joao Félix, Ferran Torres, que aporta exactamente lo mismo que el portugués. Sin la opción de situar a Gavi como falso extremo, al entrenador no le quedan más opciones, ya que Raphinha no brilla por la izquierda. No le queda más remedio que seguir dándole minutos a Joao Félix, a ver si acaba explotando de una vez por todas.