Jonathan David no quiere aterrizar en el Barcelona solo, y Deco está trabajando en un movimiento doble que podría transformar el futuro azulgrana. El delantero canadiense, que ya ha manifestado públicamente su deseo de vestir la camiseta del Barça, se perfila como uno de los refuerzos más prometedores para la próxima temporada. Sin embargo, no sería el único jugador del Lille que llegaría al Camp Nou, ya que el club también tiene en su radar a Lucas Chevalier, un joven portero francés que apunta a ser una de las grandes figuras bajo palos en los próximos años.
Con apenas 24 años, Jonathan David ha demostrado su valía en el Lille, donde esta temporada ya acumula 13 goles en 19 partidos. Es un atacante versátil, rápido y con un olfato goleador que encajaría perfectamente en el esquema de Hansi Flick, quien busca alternativas para reforzar el ataque. La posible llegada de David se alinea con el plan del Barcelona de rejuvenecer su plantilla sin perder calidad, y más aún con el futuro incierto de jugadores como Robert Lewandowski, que podría estar en su última etapa en el club.
Pero lo que hace que este movimiento sea aún más interesante es el interés por Lucas Chevalier, considerado uno de los porteros más prometedores del fútbol francés. Con 23 años, ya se ha consolidado como titular en el Lille, destacando por sus reflejos, serenidad y capacidad para jugar con los pies, una cualidad esencial en el estilo de juego del Barça. Aunque Marc-André ter Stegen sigue siendo indiscutible una vez se recupere de la lesión, en el club saben que el alemán no será eterno y ven en Chevalier un candidato ideal para competir por el puesto y eventualmente tomar el relevo.
La operación no será sencilla, pero el vínculo entre Deco y los responsables del Lille podría facilitar las negociaciones. Además, el hecho de que Jonathan David llegue como agente libre abarataría los costes globales, lo que permitiría al Barça invertir en Chevalier sin comprometer demasiado sus finanzas. Según fuentes internas, el portero francés está valorado en unos 25 millones de euros, una cifra que el club catalán podría asumir si encuentra vías para liberar masa salarial.
Con este posible "2x1", Deco no solo busca reforzar dos posiciones clave, sino también enviar un mensaje de ambición: el Barcelona está decidido a seguir compitiendo al más alto nivel. Tanto David como Chevalier tienen el talento y la proyección necesarios para ser piezas importantes en el proyecto azulgrana, y su llegada podría marcar un antes y un después en la planificación deportiva del club. Joan Laporta, que ya está al tanto de las gestiones, ve en este doble movimiento una oportunidad única para asegurar el futuro del equipo.