Jonathan David es uno de los delanteros que más han sonado para reforzar al Barça durante el mercado veraniego. La renovación de Robert Lewandowski no significa que Joan Laporta y Deco haya decidido paralizar la búsqueda de un nuevo goleador que pueda dosificar al ‘9’, quien cumplirá 37 años en el mes de agosto, y ya ha demostrado que no puede disputar absolutamente todos los minutos, a pesar de que sigue teniendo unas estadísticas brutales.
Pero en más de una ocasión también ha quedado comprobado que no puede aguantar la exigencia física de los partidos de máxima tensión, y ha sido señalado en varias ocasiones. Por ejemplo, en la eliminatoria contra el Benfica, en la cual pasó totalmente desapercibido. Ferran Torres ha sido un recambio útil para Hans-Dieter Flick, pero la realidad es que tampoco acaba de confiar en sus habilidades, y tiene muchas opciones de salir del Camp Nou si llega una buena oferta en verano.
Y han aparecido varias alternativas para el ataque, con la estrella del LOSC Lille figurando entre los candidatos. Hay muchas razones para estudiar su incorporación, comenzando por la experiencia que acumula en la élite, y por las espectaculares actuaciones que ha realizado durante los últimos años. Por ejemplo, en el presente curso ha sido capaz de anotar un total de 23 dianas y de repartir 10 asistencias en los 40 choques que ha disputado.
Aunque sin duda alguna, es el hecho de que finalice contrato el 30 de junio lo que provoca que sea tan atractivo, y que tantas entidades se hayan posicionado para intentar hacerse con sus servicios. Borussia Dortmund, Chelsea, Arsenal, Liverpool, AC Milan o AS Roma han contactado con el agente de David, y Laporta y Deco no han perdido el tiempo. Saben que el ex del Gent belga y del Ottawa no renovará, y es una ganga que el Barça desea aprovechar.
Sin embargo, no será sencillo en absoluto, valorando el elevado sueldo que el internacional canadiense reclamará, y en especial, que no se conformará con ser suplente.
David impone la titularidad para llegar a un nuevo club
David está acostumbrado a jugar absolutamente todos los minutos posibles, y solamente aceptará irse a un equipo donde pueda tener un rol similar. Porque no aceptará ser suplente.
Una cosa que complica enormemente su desembarco en el Barça, ya que Lewandowski seguirá siendo un fijo para Flick.