El Barça necesita nuevos alicientes y recuperar aquella sensación de dominio. Actualmente, con Ronald Koeman dirigiendo el equipo, no hay manera que la plantilla alce la cabeza y demuestre que todavía sabe jugar un buen fútbol. Y, por este motivo, algunos futbolistas empiezan a mover ficha para garantizarse un buen futuro.
Jordi Alba y su futuro en el Barça
Viendo como Joan Laporta es incapaz de despedir a Koeman por culpa de un motivo económico y por la falta de un sustituto claro, hay ciertos jugadores que se van cansando de la situación. Además, los resultados no acompañan y no hay un plan de juego definido dentro del equipo. Y mientras hay dudas e incógnitas a nivel deportivo, los futbolistas se replantean su futuro.
Joan Laporta levantando la mano / EFE
Pero dentro del vestuario hay dos tipos de sentimientos: los que se reafirman y renuevan como Ansu Fati o Pedri González, o los que piensan que lo mejor sería dar un paso al lado. Y dentro de este último grupo aparece Jordi Alba, que mientras va pasando el tiempo y él ya suma 32 años, podría estar llegando su final en el Barça.
El lateral izquierdo de L'Hospitalet acaba contrato en el año 2024, así que todavía le queda cuerda para unos cuantos años, pero no parece tener el mismo objetivo que el club blaugrana. Por esto se plantea dejar el Barça en el momento actual, todavía siendo titular indiscutible y dejando una buena suma de dinero en la caja del club. Y se ha puesto en contacto con uno de sus grandes amigos en el mundo del fútbol.
Jordi Alba jugando un partido con el Barça / EFE
El PSG podría ser una opción para Jordi Alba
Jordi Alba es el único gran amigo que le queda a Leo Messi en el Barça, y a los dos no les haría nada reencontrarse. El lateral blaugrana no le haría un feo a una oferta del PSG y acabar su carrera deportiva bañado de oro y de millones en el club parisino. Además, el factor Messi, su mejor socio en el Camp Nou en los últimos años, podría ser determinante en su decisión de dejar paso a los más jóvenes en el Barça y plantearse nuevos retos en un nuevo país.
También sería una buena fórmula para el Barça de deshacerse de algunos millones de euros que podrían ayudar al fair-play financiero del club. Jordi Alba cobra cerca de 12 millones de euros netos por temporada y su marcha provocaría un gran aligeramiento de la masa salarial del primer equipo. Que se marche uno de los que más cobra sería un paso más hacia la estabilidad financiera del club blaugrana.
Jordi Alba celebrando un gol con Leo Messi / EuropaPress
Al Barça no le iría mal esta marcha de Jordi Alba a nivel económico, pero deportivamente perderían mucho más. Ahora mismo el lateral de L'Hospitalet es uno de los intocables y no hay recambio de garantías a la vista. Además, la posible marcha de Jordi Alba no es prioritaria y Joan Laporta tiene otros problemas sobre la mesa. Sin embargo, Jordi Alba ya sabe que Messi le estaría esperando en París con los brazos abiertos.
Imagen principal: Leo Messi junto con Gerard Piqué y Jordi Alba durante un entrenamiento del Barça / FC Barcelona