Joan Laporta quiere renovar los aires en el vestuario del FC Barcelona. El presidente blaugrana es muy consciente de la necesidad de seguir aligerando masa salarial, además de conseguir nuevos liderazgos en la plantilla. A ese respecto, el máximo mandatario culer ha hecho una oferta a Jordi Alba para renovar su contrato, que acaba en 2024. El lateral catalán podría no aceptar y es que Laporta quiere rebajar el sueldo a las vacas sagradas un 50%.
El futuro de Jordi Alba, en el aire
Lo cierto es que el lateral de Hospitalet no empezó la temporada de la mejor forma. Xavi Hernández parecía no contar con él, tras la llegada de Marcos Alonso y la irrupción de Alejandro Balde en el lateral izquierdo. Es más, el Barça quiso desprenderse del futbolista en la última ventana de traspasos, con una cesión al Inter de Milán.
De hecho, la operación no se concretó por la negativa del defensa blaugrana a marcharse a Italia. Los culers pretendían cederlo, asumiendo el 60% de su ficha, pero Jordi Alba se negó a abandonar el barco, lo que significó en una bronca entre Joan Laporta y el mismo jugador, con palabras muy subidas de tono.
El lateral izquierdo siempre ha mostrado su deseo de cumplir el año de contrato que le resta y siempre ha comentado que está dispuesto a ayudar económicamente al Barça. Precisamente, eso es lo que quiere la directiva blaugrana. De seguir con el año de contrato que le queda, debería rebajarse el sueldo un 50%. Si no lo hace, Laporta podría decidir rescindir anticipadamente su contrato.
Laporta ofrece la renovación a Busquets
Otro de los que tiene un futuro incierto es Sergio Busquets. Es uno de los pesos pesados del conjunto blaugrana, y otro a quien Laporta ha ofrecido una renovación de contrato a la baja. Pese a que parecía estar más fuera que dentro, la buena sintonía entre el de Badia y Xavi Hernández ha hecho que el pivote se replantee su futuro. Parecía que Busi iba a marcharse al Inter de Miami de David Beckham, pero ahora no hay nada claro.
A ese respecto, el presidente blaugrana ha asegurado que será el futbolista quien decida, ya que se ha ganado el derecho. Eso sí, de continuar, también lo haría con una renovación de contrato que implicaría reducir su salario en un 50%. La directiva azulgrana quiere acabar con el cuento de las "vacas sagradas", conscientes de la necesidad de reducir las diferencias salariales entre los mejor y peor pagados de la plantilla.