Día grande en Italia. El Gran Premio de San Marino y la Riviera di Rimini es una cita marcada en rojo en el calendario, especialmente para los que corren en casa. El circuito Marco Simoncelli está ubicado en la cuna del motociclismo, en Italia, cerca de las fábricas de Ducati y de Aprilia. La afición italiana es de las más entregadas del Mundial, y han ido a disfrutar del máximo espectáculo del mundo del motociclismo, que ha arrancado entre el humo de las bengalas y los ánimos de los seguidores, muy congregados para ver como Jorge Martín cierra un fin de semana perfecto.

El fin de semana de Jorge Martín

Las Ducati han decidido ser las protagonistas indiscutibles del gran premio de casa. Los tres pilotos que salían de la primera línea, Jorge Martín, Pecco Bagnaia y Marco Bezzecchi sabían qué tenían que hacer: escaparse desde los primeros compases de la carrera. El vigente campeón del mundo, Bagnaia, no ha tardado en ganarle la posición a Bezzecchi y ponerse en rueda de Jorge Martín, el piloto madrileño que ha dominado el fin de semana de arriba abajo: pole, victoria en la carrera sprint y oro en el día grande. De esta manera, el madrileño se pone a solo 36 puntos del líder. El Mundial está más abierto que nunca.

El grupo líder ha unido fuerzas y, juntos, se han escapado de sus perseguidores. El único capaz de seguir el ritmo ha sido Dani Pedrosa, el piloto probador de KTM que ha disputado el fin de semana como wild card. A medida que los neumáticos se iban desgastando, Jorge Martín ha impuesto su ritmo y se ha mostrado implacable, en la línea de todo el fin de semana. Ha ampliado las distancias a un ritmo vertiginoso y, finalmente, se ha llevado la victoria con más de un segundo de margen sobre el segundo. Bagnaia, castigado por el físico, ha acabado perdiendo la posición con respecto a Bezzecchi, pero se ha aferrado al podio como si le fuera la vida en ello. Vestido de amarillo en honor en las primeras Ducati, ha honrado a su fábrica y ha entrado en el parc fermé destrozado, pero con un bronce al cuello.

Los dos fantásticos

Con 37 años, lleva cinco fuera de la competición. La leyenda de MotoGP que nunca llegó a levantar ningún título a la categoría reina, el piloto que Honda miró por encima del hombro como si no fuera nadie y que decidió a unirse a un proyecto pequeño y ayudar en la evolución como piloto probador, entre bastidores. Discretamente, se ha convertido en uno de los protagonistas del fin de semana. Sin quererlo, Dani Pedrosa ha sido el único piloto capaz de seguir el ritmo en las Ducati. Poco a poco, vuelta tras vuelta, la KTM del pequeño samurái se iba acercando a las motos imbatibles. Hoy, los mayores se han sentido niños viendo cómo Pedrosa luchaba una vez más por el podio, como en los viejos tiempos. Finalmente, no ha conseguido obrar el milagro, pero se ha llevado una meritoria cuarta posición y la admiración de toda la afición.

El otro protagonista del fin de semana ha sido Marc Márquez. Tiene todos los ojos encima fuera de pista. La incertidumbre que rodea su futuro ha sido el principal tema de conversación en el paddock este fin de semana, aunque, según informa El Periódico, parece que la decisión final es seguir con Honda. De lo que no se habla es de lo que ha hecho dentro de la pista, y es que, sin hacer mucho ruido, ha firmado su mejor domingo en todo lo que va de temporada. Saliendo desde el noveno lugar de la parrilla, Márquez ha conseguido ganar posiciones y, después de rodar sexto y luchar por la quinta posición, ha acabado séptimo, firmando así el mejor fin de semana de todo el curso.

Con respecto a los otros pilotos de casa, Maverick Viñales ha podido salvar una mala salida y ha acabado quinto. Raúl Fernández ha firmado una actuación espectacular y ha luchado con Marc Márquez para, finalmente, terminar octavo. Àlex Márquez y Aleix Espargaró han logrado una undécima y una duodécima posición respectivamente y, quien no ha corrido la misma suerte, son Pol Espargaró y Joan Mir, que han acabado el fin de semana por el suelo. Empieza la recta final del Mundial. Dentro de dos semanas, MotoGP pone rumbo a Asia para disputar el GP de la India.