Los jugadores del Manchester United debían lucir una chaqueta en apoyo a la comunidad LGTB en la previa del partido contra el Everton. Ese era el plan de Adidas, que había diseñado la chaqueta para la ocasión, y del club de Old Trafford, pero a la hora de la verdad se encontraron con la negativa de la plantilla, tal y como ha adelantado el medio The Athletic.
Todo se desencadenó con la negativa del marroquí Noussair Mazraoui, que afirmó que, por sus creencias religiosas, no podía lucir la chaqueta, diseñada por Adidas para la campaña denominada Rainbow Laces, con la cual la Premier League pretende visualizar la inclusión e igualdad del colectivo LGTB. La campaña se lleva celebrando en Inglaterra desde el 2013 y no es la primera vez que genera controversia.
Adidas, molesta con el Manchester United
Según apunta The Athletic, la decisión irrevocable de Mazraoui generó un debate en la plantilla del Manchester United, ya que había jugadores partidarios de lucir la chaqueta y otros a no lucirla, hasta que se impuso la opinión del lateral.
La decisión de la plantilla de rechazar la chaqueta no ha sentado nada bien a Adidas, que tiene un acuerdo con el Manchester United de más de 1.000 millones de euros por 10 temporadas, una cifra muy elevada como para que el club no cumpla con los puntos fijados en el contrato. Ante la polémica, el United publicó un comunicado en apoyo a la comunidad LGTB. “El Manchester United da la bienvenida a todos los aficionados, incluyendo a los miembros del colectivo LGTB, y estamos muy comprometidos con los principios de la diversidad y la inclusión. Demostramos estos principios a través de diferentes actividades. Los jugadores tienen derecho a dar sus propias opiniones, especialmente respecto a su fe, y estas puedes ser diferentes en ocasiones a las del club”.
Varios jugadores en contra de la campaña
Esta no es la primera vez que Mazraoui se ve envuelto en una polémica de este tipo. El año pasado, sin ir más lejos, el marroquí, entonces miembro de la plantilla del Bayern de Múnich, mostró su apoyo a Zakaria Abuokhlal después de que este jugador del Toulouse se negara a participar en una iniciativa similar en Francia.
En Inglaterra, la campaña se lleva celebrando desde el 2013 y ya ha generado controversias. El año pasado, por ejemplo, Sam Morsy, capitán del Ipswich Town, ya decidió desmarcarse del resto de capitanes, al negarse a vestir el brazalete arcoiris, mientras que Marc Guehi, capitán del Crystal Palace, escribió en el brazalete “Amo a Jesús".