Mikheil Kavelashvili se ha convertido este fin de semana en el nuevo presidente de Georgia. El líder del partido Sueño Georgiano, con una fuerte retórica antioccidental, ha recibido el voto de 244 diputados nacionales y municipales de los 300 convocados, en un ambiente muy enrarecido por el intento de boicot de la oposición, liderada por la actual presidenta, Salomé Zurabishvili, que se niega a abandonar el puesto al considerar antidemocrático el proceso electoral.
El punto de discordia son las elecciones parlamentarias del mes de octubre, en las que el partido Sueño Georgiano se impuso por un margen muy pequeño. A partir de ahí, y por primera vez en la historia de Georgia, el presidente del país se ha elegido por sufragio indirecto, lo que la oposición considera antidemocrático. Zurabishvili es proeuropea e incluso había iniciado conversaciones para que Georgia ingresara en la Unión Europea. Kavelashvili, en cambio, en prorruso, por lo que promueve leyes parecidas a las rusas, contrarias a la influencia europea y que reprimen, entre otros colectivos, a los homosexuales. Otro ilustre del fútbol georgiano con cargo importante es Kakhaber Kaladze, exjugador del Dinamo de Kiev y del Milan, y que desde el 2017 es el alcalde de Tbilisi, también en representación del partido Sueño Georgiano.
De un City deslucido a triunfar en Suiza
Nacido en Boinisi en 1971, en plena época soviética, Kavelashvili no tardó en demostrar una capacidad especial para jugar con un balón en los pies. Era un delantero rápido y habilidoso que marcaba goles con facilidad. Se formó en el gran club de Georgia, el Dinamo Tbilisi, hasta que en 1995 fue fichado por el Spartak Vladikavkaz ruso. Marcó 12 goles, suficiente para ser captado por el Manchester City, que en aquellos años no era la potencia europea actual. El equip sky blue, de hecho, estaba en la First Division, la segunda división inglesa. Después de 2 temporadas en las que solo logró marcar 3 goles, Kavelashvili se fue a Suiza, donde viviría sus mejores años. Pasó por el Grasshopper, el Zúrich, el Lucerna, el Sion, el Aarau y el Basilea, convirtiéndose en todo un clásico del fútbol suizo.
A nivel internacional, Kavelashvili defendió la camiseta de Georgia en un total de 46 partidos, en los que marcó 9 goles. Siendo una selección menor, sobre todo en aquellos años, el mayor éxito de Georgia fue la victoria del Torneo Rothmans, un campeonato internacional que se celebró en Malta entre 1986 y el 2008. En 1998, Georgia se impuso a Malta en la gran final y Kavelashvili fue el máximo goleador del torneo, con 3 dianas.
Salto meteórico a la política y acusado de populista
Retirado de la práctica deportiva, Kavelashvili volvió a Georgia, para iniciar su carrera política. En el 2016 fue elegido miembro del Parlamento de Georgia por el partido Sueño Georgiano, del que salió en el 2022, para fundar el partido Poder Popular. Aún y así, ambos partidos siguieron estando estrechamente vinculados, hasta el punto de que Kavelashvili ha sido proclamado presidente de Georgia por el partido Sueño Georgiano.
Tras la proclamación, Kavelashvili se convierte en el segundo exfutbolista profesional en erigirse en el presidente de un estado, después de que George Weah, leyenda del PSG y del Milan, presidiera Liberia entre 2018 y el pasado 22 de enero.