Joshua Kimmich es sin ningún tipo de duda uno de los mejores centrocampistas del mundo. Y todavía destaca más en la posición de pivote. Y el Barça, sabiendo que después de la marcha de Sergio Busquets y de la falta de un referente en esta demarcación del campo no hay un rumbo claro, cada vez piensa más en el futbolista alemán.
Kimmich, una apuesta repetida del Barça
Kimmich, de 28 años, todavía tiene contrato con el Bayern de Munich hasta el 2025, pero todo apunta que esta vinculación contractual se podría romper antes de tiempo, sobre todo pensando en el próximo verano. Y es que el mediocentro alemán se separó de su representante en busca de un futuro mejor. Y desde la prensa alemana se apunta que la intención de Kimmich es abandonar el Bayern.
Y este punto y final de Kimmich en el Bayern llegará pronto. Y por eso hay muchos clubs que lo tienen en el punto de mira. Y el Barça es uno de los clubs que hace tiempo que lo observa. Ya hubo un gran interés en el pasado mercado de fichajes de verano, pero no se cerró nada. Y ahora se podrían volver a acercar posturas. Todo sea para que el Barça consiga al futbolista que tanto necesita y que Kimmich deje atrás su etapa en el club bávaro.
Sin embargo, el club que se quiera llevar a Kimmich tendrá que saber que su valor de mercado es de 75 millones de euros y que difícilmente el Bayern de Munich accederá a hacer una rebaja sustancial de este precio. Y por este motivo tanto el Barça como cualquier otro club dispuesto a ficharlo ya sabe que tendrá que abonar una gran cantidad económica.
El Barça tiene que ser un equipo ganador
Y lo que pasa al Barça es que a pesar de saber que quiere fichar a Kimmich no está tan claro que lo pueda hacer. Uno de los motivos es porque el futbolista alemán si cambia de club quiere ir a un sitio donde sea protagonista en todos los sentidos. Aparte de ser un jugador importante, quiere que el club donde vaya aspire a todo. Y ahora mismo el Barça no es este equipo. Por eso hace falta dar un paso adelante a nivel deportivo y hacer una limpieza importante, que es lo que ve Kimmich y el resto del mundo del fútbol.
Y el otro motivo es el económico, ya que el Barça no tiene dinero para hacer grandes operaciones y la compra de Kimmich tiene un precio muy alto. Por eso hará falta ahorrar y gestionar lo mejor posible la situación financiera si se quiere hacer un fichaje como el de Kimmich, o algún otro del mismo nivel.
El Barça, pues, tiene que devolver a construir un proyecto ganador para así convencer a todos los futbolistas que quieran ir al club blaugrana. Ya no solo es un aspecto de nombre y de pasado, sino que tiene que ser una atracción de presente y de futuro.