Deco tiene en mente una jugada maestra para reforzar al Barcelona y al mismo tiempo aliviar las finanzas del club. La posibilidad de incorporar a Joshua Kimmich en enero ha vuelto a ganar fuerza en los despachos del Camp Nou, y la clave para que la operación sea viable podría ser incluir a Frenkie de Jong en la negociación. Con esta maniobra, el director deportivo blaugrana aspira a "matar dos pájaros de un tiro": fichar a uno de los mediocampistas más codiciados del fútbol europeo y liberar al Barça de uno de los salarios más altos de su plantilla.
El interés del Barça por Kimmich no es nuevo. El mediocampista alemán, que acaba contrato con el Bayern de Múnich en verano, encaja perfectamente en el esquema de Hansi Flick, quien lo considera una pieza clave para el centro del campo. Además, Kimmich ya ha expresado en el pasado su admiración por el Barcelona, lo que refuerza la idea de que estaría dispuesto a cambiar de aires. Ante el riesgo de perderlo gratis en junio, el Bayern se plantea aceptar una oferta favorable en enero para cerrar su salida antes de tiempo.
Por otro lado, la situación de De Jong en el Barça está lejos de ser ideal. A pesar de su talento innegable, el holandés no ha logrado ganarse un lugar en los planes de Flick, quien prefiere otras opciones en la medular. Además, su elevado salario supone un lastre para un club que sigue luchando por equilibrar sus cuentas y cumplir con las restricciones financieras impuestas por LaLiga.
La idea de un intercambio entre De Jong y Kimmich parece beneficiosa para ambas partes. El Bayern de Múnich obtendría a un jugador de calidad contrastada y con perfil versátil, mientras que el Barça reforzaría su centro del campo con un mediocampista que combina liderazgo, visión de juego y polivalencia. Al mismo tiempo, los culés se liberarían de una de las fichas más altas de su plantilla, lo que permitiría ajustar mejor su masa salarial.
Desde el punto de vista deportivo, Flick ve en Kimmich a un mediocampista que puede aportar equilibrio, experiencia y calidad en la salida de balón. El alemán es un futbolista que lleva años en la agenda del Barça, y su llegada supondría un salto de calidad inmediato para el equipo. Por su parte, la salida de De Jong no sería vista como un sacrificio, dado que su protagonismo ha disminuido considerablemente esta temporada.
Las conversaciones entre Deco y el Bayern de Múnich están en marcha, y todo apunta a que los próximos días serán decisivos. Si la operación llega a buen puerto, el Barça no solo se aseguraría un fichaje estelar, sino que también daría un paso importante en su objetivo de ajustar las cuentas sin comprometer el proyecto deportivo.