Raphinha está pasando por un buen momento en el Barça, siendo titular en los últimos partidos. Pero aunque haya dejado algunos detalles interesantes de la enorme calidad técnica que atesora en sus botas, sigue sin convencer lo suficiente. Es demasiado irregular e intermitente, y eso ha provocado que las críticas hacia su figura sean constantes. Muchos se preguntan si fue una buena inversión, considerando el precio que tuvieron que pagar.
Prácticamente 60 millones de euros que lo que desembolsaron Joan Laporta y Mateu Alemany por un crack que venía de ser una de las revelaciones de la Premier League. Una apuesta muy arriesgada, y que todavía no está dando sus frutos. El primero que tiene dudas con el internacional brasileño es Xavi Hernández, que comenzó colocándolo como titular, pero acabó quitándole el puesto, para colocar a un centrocampista más, siendo Frenkie de Jong el gran beneficiado.
Ahora mismo, el ‘22’ únicamente está teniendo continuidad por la lesión de Ousmane Dembélé, pero cuando ‘el Mosquito’ regrese, volverá a ser suplente. Y en el Camp Nou hay muchas informaciones que sugieren que están planteándose el traspaso del ex del Leeds United, del Stade Rennais o del Sporting de Portugal, siempre y cuando puedan recuperar lo que pagaron por él hace pocos meses. Una misión que no será sencilla, en absoluto.
El futbolista de 26 años, por su parte, no quiere hablar sobre su futuro, y asegura estar muy feliz en el Barça. Pero la realidad es que si no le garantizan un papel principal, puede acabar haciendo las maletas, y en enero estuvo en conversaciones con algunos conjuntos que en el pasado mostraron un increíble interés por su firma, como el Chelsea, el Tottenham Hotspur o el Arsenal. Y ahora también se había atrevido a contactar con el Liverpool.
Los ‘reds’ estudiaron su contratación después de confirmarse la salida de Sadio Mané con dirección al Bayern de Múnich, aunque llegaron demasiado tarde, y Laporta ya había salido ganador de la subasta.
Jürgen Klopp ya no quiere saber nada de Raphinha
Pero Jürgen Klopp ya no quiere saber absolutamente nada de Raphinha. En Anfield tiene las puertas cerradas, y no perdonan que no tuviera un poco más de paciencia, pues habían mantenido contactos con el sudamericano antes de que se decantara por aterrizar en el Barça.
Después de firmar a Cody Gakpo procedente del PSV Eindhoven, el Liverpool considera que tiene la parcela ofensiva más que cubierta.