La pizarra de Koeman saca humo desde que fue informado por los servicios médicos del FC Barcelona que se quedaba sin su perla más reluciente, Ansu Fati, hasta marzo. 4 meses y 31 partidos en los que al holandés le encantaría disponer de Depay, un sueño prácticamente imposible por la delicadísima situación económica de la entidad blaugrana. Es por ello que Koeman ya trabaja a destajo para encontrar la fórmula mágica para suplir a Ansu Fati con la menor incidencia posible.
Que si jugar con un extremo abierto (Dembélé) y otro cerrado (Pedri o Coutinho) para dejar el carril zurdo a Alba y el centro del ataque a Messi y Griezmann, que si reforzar el centro del campo con una tercera pieza, que si renunciar a los extremos puros para aumentar el juego de asociación y aprovechar la verticalidad de Dest y de Jordi Alba, que si darle mayor protagonismo a Braithwaite, ya sea de 9 o de extremo... Las opciones son muchas, pero parece que hay una que se contempla menos y a la que Koeman le está dando un gran valor: Konrad de la Fuente.
Konrad, el día que debutó con el primer equipo del Barça, contra el Girona / FCB
Koeman, impresionado con el potencial de Konrad de la Fuente
"Si tengo que destacar a un jovencito diría Konrad, estoy muy contento con él. Tenemos un gran futuro por delante". Esa fue la sorprendente frase que dejó ir Koeman tras el amistoso de pretemporada contra el Girona, el día en el que el extremo del Barça B, junto con Pedri, se ganó la atención del técnico holandés. "Estoy muy feliz de tener esta oportunidad de jugar en el primer equipo. Ha sido mi objetivo y mi sueño desde que era un niño. Estoy muy agradecido por la oportunidad que me han dado. Ahora tengo que creer en mí y tener confianza", aseguró Konrad tras el partido.
Konrad de la Fuente es de origen haitiano, pero nació en Miami por el trabajo de su padre, Conrad, diplomático del país caribeño. Por ello tiene la nacionalidad estadounidense (fue el primer jugador de los Estados Unidos en debutar con el primer equipo del Barça) y, por ello mismo, juega en el Barça desde que tenía 10 años.
Y es que cuando el padre del blaugrana fue destinado a Catalunya, Konrad ya mostraba buenas dotes con un balón en los pies. Fue captado por la Academia Tecnofútbol de Barcelona, donde el Barça ya anotó su nombre en la agenda, y de ahí pasó a la Damm, donde acabó de convencer a los ojeadores blaugrana para incorporarlo al infantil del Barça.
Konrad, en un partido contra el Slavia de la temporada pasada / FCB
Potencia, desborde y pólvora, las grandes cualidades de Konrad
Y desde su aterrizaje al selectísimo futbol base del Barça, la evolución de Konrad ha sido constante. Porque a su capacidad de ver portería con facilidad y a su potencia natural, gracias a un fortísimo tren inferior, el extremo ha añadido calidad en los uno contra uno y, sobre todo, capacidad de asociación y lectura del juego, los dos aspectos en los que los técnicos más han incidido para lograr un crecimiento. El año pasado, con ficha del juvenil, ya se ganó un sitio en el filial de García Pimienta, y este verano de corta pretemporada, ha hecho lo mismo con Koeman.
De momento, Konrad entrena con el primer equipo y ya ha entrado en alguna convocatoria, la antesala al paso definitivo. En un primer momento, Koeman tenía pensado quemar esta etapa más adelante, sin prisas, pero ante la baja de Ansu Fati ya no descarta darle la oportunidad. Konrad, diestro de pierna, se encuentra a gusto en la banda izquierda, para perfilarse al centro y sacar a relucir su potente disparo, aunque otra opción que se maneja es la de situarlo de falso 9.
Ya se sabe que en esto del fútbol a veces las eclosiones se producen por las razones menos esperadas. Sin Ansu, Konrad es el siguiente.